Echaron al responsable de que Los Andes y Tigre no jueguen con público

El lamentable desenlace que tuvo el encuentro entre Tigre y Los Andes por la Copa Argentina ya encontró a su primer responsable: el titular de la Aprevide.

Gustavo Gómez, quien estaba a cargo de la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (Aprevide), fue desplazado de su cargo por orden de la gobernación de la Provincia, a horas de que se diera el conflicto con los hinchas del Milrayitas en el marco del cruce ante Tigre.

Dicho organismo de seguridad había dado los avales para que el partido entre ambos equipos se jugará en la cancha de Lanús con hinchas de las dos parcialidades e incluso ya se habían empezado a vender las entradas. Fue allí, a menos de 30 horas del encuentro, cuando el secretario de Seguridad de Lanús, Diego Kravetz, elevó la queja por tener que ser su Municipio el que acuñe a las hinchadas. Y lo pactado ya no se respetó.

A partir de allí se sucedieron una serie de desprolijidades que terminaron con el partido trasladándose a la cancha de Deportivo Morón (en el mismo día) y jugándose sin público, algo que la dirigencia y los jugadores de Los Andes no aceptaron y, por lo tanto, no se presentaron. Tigre si lo hizo y se le dio por ganado el encuentro, sin siquiera jugarse un minuto.

Apenas unas semanas atrás, había ocurrido algo similar con las hinchadas de Gimnasia de La Plata y Liniers, también por la Copa Argentina. En esa ocasión, la Aprevide terminó aceptando por la presión de la dirigencia del Lobo y se respetó lo pactado, algo que exacerbó aún más a los dirigentes de Los Andes.

A esto se sumaron hechos de violencia dentro de las barrabravas de Independiente y de Racing, que también aceleraron su salida. Mientras que, en Banfield, un pedido del organismo obligó a que la tribuna Osvaldo Fani, históricamente popular, tenga que pasar a ser platea y no pueda estar habilitada para el primer partido del torneo, este fin de semana ante Newell's.