El buen arranque de Lanús y cómo hacerle un lugar al Laucha Acosta

Lanús tuvo un arranque inmejorable en la Copa de la Liga, con dos triunfos, sobre Independiente y Defensa y Justicia. Y eso que Lautaro Acosta, una de sus figuras arrancó ambos encuentros en el banco de suplentes. 

Ante la ausencia obligada del Laucha, el técnico del Granate, Luis Zubeldía, decidió modificar el esquema: pasó del 4-4-2 que lo llevó a la final de la Copa Sudamericana al 4-3-3, con la inclusión de un tercer mediocampista interno. Ese lugar en las dos primeras fechas fue para Facundo Pérez. 

Ahora, Lanús deberá enfrentar el martes a Real Pilar, por los 32avos de final de la Copa Argentina. Quizás el entrenador decida rotar en algunas posiciones, pero ya desde la próxima fecha del campeonato se le presentará un problema, de los lindos para los DT: cómo hacerle lugar a Acosta con un equipo que levantó en funcionamiento (el equipo se ve con un juego más fluido y mejor tenencia de pelota) y arrancó ganando. 

Lanús fue muy superado contra Defensa y Justicia en la final de la Copa Sudamericana (derrota 3-0, sin atenuantes) y ya le había costado desde el juego la serie ante Vélez (4-0, pero con Morales como figura en la ida y con mucho sufrimiento en el primer tiempo en la vuelta). Los dos primeros partidos del campeonato exhibieron a un Lanús protagonista ante Independiente y competitivo de igual a igual ante Defensa y Justicia. El cambio de esquema, con el agregado de un tercer volante, le dio más juego al equipo. 

Para que ingrese Acosta, Zubeldía podría sacar a uno de los extremos (Pedro De La Vega o Nicolás Orsini) o bien volver al sistema que tan buenos resultados le dio en la Sudamericana, aunque sin tanto funcionamiento colectivo. 

Lo concreto es que el Laucha, ídolo de los hinchas y referente del plantel, es vital en el equipo y ahora Zubeldía deberá resolver cómo incluirlo nuevamente en la formación inicial sin modificar demasiado el andamiaje que, en el arranque, le dio resultados y funcionamiento.