Avanza la causa del excomisario detenido en Centenario por un doble crimen
REVÉS JUDICIAL. Las víctimas, el monaguillo Germán Zucarelli y su tía jubilada, fueron asesinados a tiros. La causa tiene dos detenidos que podrían ser juzgados.
La investigación por un doble crimen en Lanús, que tiene como uno de los acusados a un excomisario de la Policía Bonaerense detenido en Villa Centenario, podría ser elevada a juicio en las próximas semanas, luego de un nuevo revés judicial para los imputados.
Fuentes judiciales informaron a La Unión que recientemente la Justicia ratificó la prisión preventiva de C.B., el otro sujeto procesado que tiene la causa, además de Adrián Brulc, el exfuncionario policial que sería el autor material del doble asesinato.
Según estimaron, la Justicia rechazó la apelación del acusado, en un fallo que significa un paso clave para avanzar en la causa, que podría pasar a la siguiente instancia en la que serían juzgados los dos sospechosos presos.
Se trata del cuñado de German Zucarelli, el monaguillo asesinado a tiros en febrero pasado junto a su tía Ana Russo (77), quien cuenta con tres abogados particulares que se opusieron a que su defendido continuara tras las rejas y presentaron sus recursos.
La causa es llevada adelante por la fiscal María Silvia Bussano, de la UFI 7 de Avellaneda - Lanús, quien pidió que ambos sigan privados de su libertad hasta ser juzgados.
En el caso del excomisario, la Justicia llegó a él tras el seguimiento de un Volkswagen Cross Fox utilizado en el hecho, el cual fue abandonado en la calle Ginebra al 800, en Fiorito.
Durante el allanamiento de urgencia a su vivienda, ubicada en la calle Darwin al 1100, los efectivos encontraron una caja de municiones calibre 22 que eran compatibles con las que había usado el asesino. Para colmo, faltaban 12 balas, la misma cantidad que los disparados efectuados en el doble crimen.
Por su parte, la sospecha del supuesto vínculo de C.B. con el doble homicidio son los llamados que habría intercambiado con Brulc antes y después del doble crimen.
Más tarde, los investigadores determinaron que C.B. mantenía una deuda de US$15 mil con Zucarelli por la compra de un auto y que la relación entre ellos no era buena. Tanto él como el excomisario admitieron conocerse entre sí.
El cuñado de la víctima sostuvo que la noche del crimen había llamado a Brulc para invitarlo a comer, y que, luego de los asesinatos, fue el excomisario el que lo llamó, pero él le dijo que no podía atenderlo porque habían baleado a su cuñado y a la tía.
