El lomense Pablo Fuks publicó su "Casi Vol. I"
Crédito local . El músico editó la primera tanda de sus nuevas canciones, que tienen una impronta del Conurbano e influencias y guiños al rock argentino.
Pablo Fuks lanzó su "Casi Vol. I", con los singles "160" y "Fiendzone" donde muestra su impronta del sur de Conurbano en las letras y la influencia de grandes del rock argentino en las melodías y en la instrumentación.
Este talentoso músico de Lomas de Zamora completará esta aventura solista con otras dos entregas que estarán disponibles el año próximo.
"La canciones tienen una temática del Conurbano, una fuerte identidad barrial. En el Conurbano hay microidentidades que tienen su identidad y que están bien impreganadas en el aire", le cuanta Pablo a La Unión.
El músico construye historias y paisajes que transcurren en la región, como un viajes en colectivo que termina mal, contado en "160".
Los temas coquetean entre la tradición narrativa de la trova y una sonoridad plagada de referencias al rock nacional de Charly García, Fito Páez y Luis Alberto Spinetta.
"Me encargué de los teclados, las voces y los arreglos. Federico Díaz aportó las violas y las programaciones de baterías y Matías Tarragona, en bajo. Lo grabamos a la distancia, a través de videollamadas y nos pudimos ver en las últimas semanas para darle el toque final", acota.
En "Friendzone" se destacan los riffs de órgano Hammond al estilo Chicano Batman, la batería TR 808, con un link al García ochentoso, y un interludio recitado,
"160" tiene tintes tangueros, un aire de teatralidad en los efectos de sonido y arreglos cercanos al rock progresivo.
Mientras están sonando en las plataformas digitales los temas de "Casi Vol. I" y a la espera de los dos volúmenes siguientes, espera poder mostrar este material en vivo.
"Me encantaría tocar los temas con los chicos que grabaron conmigo, ya conocen los temas y son amigos", adelanta.
EN LA TECLA
"Arranqué a componer y tocar el piano a los 16 años. Vi que muchos compositores que me gustaban tocaban el piano y por eso me decidí por ese instrumento. El piano es muy amigable para entender la música por la disposición que tiene el teclado", recuerda.
En la casa de Pablo sonaban rock argentino, en especial Luis Alberto Spinetta, Charly García y Fito Páez, pero también música popular brasileña y sigue la lista. "Esa música marcó mucho mi infancia, me quedó muy grabada", recuerda.
Mientras seguía con sus canciones y formado parte de bandas, estudio Sociología y actuación hasta recalar en la Escuela de Música Popular de Avellaneda (EMPA), donde dicta clases de la materia "Piano Armónico".
También fue parte del grupo de folklore Alma Mula, con el que entró en un parate de actividades desde que comenzó la pandemia. "Me encanta el folklore. Me interesan más los autores contemporáneos, como Raúl Carnota, que tienen profundidad y sencillez al mismo tiempo", cierra.
