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Tras un paro de los trabajadores, la gráfica Morvillo se comprometió a pagar el 100% de los salarios

AVELLANEDA. La empresa pretendía abonarles solo el 70% del salario de abril. Los empleados realizaron una huelga y lograron torcerle el brazo. Ahora se abrió una nueva mesa de negociación.

Después de 26 horas de paro, los trabajadores de la gráfica Morvillo de Avellaneda lograron que la empresa diera marcha atrás en su intento de aplicar un recorte del 30% en los salarios de abril, y consiguieron abrir una mesa de negociación a partir de este lunes para discutir cómo se retomará la actividad en la planta en esta nueva etapa de la cuarentena.

Sucede que Morvillo es una de las pocas empresas del Conurbano bonaerense que obtuvo la habilitación del Gobierno para volver a producir "con normalidad". Entonces, los empleados se quieren asegurar que los dueños cumplan con los protocolos de bioseguridad y todas las medidas dispuestas por el Ministerio de Salud en el marco de la pandemia.

"Vamos a pedir que se reabra el turno noche, para evitar aglomeraciones en la planta; la entrega del protocolo de seguridad, que por ahora no sabemos cuál es; y que garanticen el transporte seguro a todos los trabajadores, algo que ya nos adelantaron que no quieren cubrir", contó Sebastián Rodríguez, miembro de la comisión interna.

Las pujas entre los directivos y los trabajadores se volvieron cada vez más recurrentes en los últimos años. "Morvillo está haciendo lo que hacen todas las patronales, pretende aprovechar la crisis económica y el contexto de la pandemia para establecer un nuevo piso de explotación que no ha podido imponer antes de la cuarentena", explicó el delegado.

A pesar de que la compañía pudo acceder al programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (a través del cual el Gobierno subsidia hasta el 50% de los desembolsos salariales y otorga beneficios sobre el pago de las contribuciones patronales), Morvillo les adeuda a sus casi 250 trabajadores el 50% del sueldo de marzo.

Antes del inicio del aislamiento social y obligatorio, la compañía intentó avanzar con la suspensión total del turno noche, bajo la amenaza de efectivizar 62 despidos. "Finalmente llegamos a un acuerdo. Mantuvimos el turno noche, que quedó reducido, pero evitamos la duplicación de puestos de trabajo, algo que a nosotros nos convenía", precisó Rodríguez.

La empresa deliberadamente, viene aplicando con un plan de ajuste desde hace años. Tras el cierre en 2014 de su planta en Pilar, la situación se agudizó, denuncian los trabajadores

"El año pasado, por ejemplo, se acostaron en la cláusula de absorción que permite a las empresas evitar los aumentos o parte de ellos y nos pegó un recorte de salario, o sea nos dio todo el aumento de salario que nos correspondía por la paritaria", apuntó.

"El mes pasado lo cobramos en 5 cuotas y logramos arrancar un cronograma de pago después de una asamblea que mantuvo parada la planta durante 5 horas", agregó.

Para los operarios este escenario "es muy agotador". "Los últimos años han sido así, ellos intentan probar hasta dónde pueden avanzar y nosotros tenemos que salir a poner límites. La última etapa ha sido marcada por eso. De hecho el paro del otro día ha sido una consecuencia de eso, los compañeros están cansados", reflexiona.

No obstante, Rodríguez sabe que lo que sucede en Morvillo no se trata de un caso aislado. "Esto es parte del cuadro general de lo que todo el movimiento obrero está viviendo. Es una etapa muy dura donde las patronales están intentando descargar la crisis sobre la espalda del trabajador. Nosotros vamos a seguir defendiendo nuestros derechos", cierra.

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