La maldición Poltergeist

POR Edgardo Solano

Una familia de clase media como tantas se muda al barrio de sus sueños a una bonita casa. El plan para una joven pareja con sus tres adorables y pequeños hijos es perfecto hasta que los fenómenos paranormales hacen acto de presencia en el día menos pensado. Y a partir de ese momento, todo cambia. De esta forma comenzaban las escenas de “Poltergeist”, una película estrenada en 1982 y que marcó un antes y un después en la forma de entender el miedo y el terror. De todos modos, esta adorable familia de ficción no fue la única que sufrió circunstancias paranormales. Delante y detrás de las cámaras sucedieron momentos terribles que se transformaron en un mito urbano con el correr de los años en esta trilogía cinematográfica. Muchos cuentan que los rodajes de la saga “Poltergeist” estaban malditos, que los sets de filmación se quemaban sin explicación, que los objetos desaparecían sin que nadie los tocara y otras historias de similar estilo. Pero también son muchos los que dicen que son sólo leyendas y lo que no pueden negar es la serie de catastróficas desgracias que sucedían cada vez que finalizaba el rodaje de cada entrega de esta saga. Cuatro meses después de terminar de rodar la primera entrega de “Poltergeist”, la actriz Dominique Dunne, que interpretaba a la hermana mayor de Carol Anne, fue asesinada a manos de su expareja John Swenney. De hecho, la segunda entrega de la saga está dedicada a su memoria. Pero no es la única muerte prematura que salpicó a la saga de “Poltergeist”. Según revelaron algunos de los miembros del rodaje de la segunda entrega, Will Sampson hizo varios rituales en el set para eliminar maldiciones, ya que el rodaje, esta vez sí, fue un cúmulo de accidentes peligrosos que quedarán en la memoria de la historia cinematográfica. Por ejemplo, Julian Beck, que interpretaba al sacerdote Kane, falleció durante el rodaje a causa de un cáncer de estómago. Poco después, falleció Taylor, un brujo indio al que daba vida el propio Will Sampson, debido a una complicación renal durante su posoperatorio. La leyenda nefasta no termina aquí. La tercera entrega también estuvo teñida por la muerte de uno de los miembros del reparto. La pequeña Heather O´Rourke fue la víctima de “Poltergeist III”. La actriz que interpretó a Carol Anne durante toda la saga comenzó a sentir dolores estomacales durante el rodaje. A consecuencia de estos, falleció con sólo 12 años. El motivo de su muerte fue una extraña enfermedad que los médicos fueron incapaces de detectar a tiempo: estenosis congénita. Tan poco fue el tiempo que pasó entre el final del rodaje y la muerte de la pequeña Heather O´Rourke que cuando la productora MGM le pidió al director Gary Sherman que repitiera el final, ella ya no estaba en este mundo.