Crece la importación de alimentos

En los últimos dos años, la llegada de productos desde el exterior subió un 23% en promedio.

La situación enciende la alarma en los pequeños productores de todo el país. A partir de las políticas macroeconómicas aplicadas por el Gobierno de Mauricio Macri, la importación de alimentos creció un 23% en promedio en los últimos dos años y ya ingresan alimentos como lácteos, quesos, cebollas, cerdos, manteca, batatas, naranjas y zanahorias.

Los datos se desprenden de un informe del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (CESO) que analizó el período comprendido entre enero y mayo de este año y lo comparó con los registros del mismo ciclo de 2015 y 2016. Pese a la llegada de nuevos productos, el aumento de la oferta no registra una caída de los precios de los alimentos.

“De US$282 millones utilizados para importar en el año 2015 pasamos a utilizar US$377 millones”, detalla el análisis. A modo ilustrativo, con esos US$95 millones se podrían haber comprado 75 coches de ferrocarril 0 kilómetro como los que se compraron para la línea Sarmiento en 2014.

“La importación de estos productos afecta de manera directa a los productores locales, que se ven desplazados por esta nueva competencia, y al conjunto de la población, ya que se trata de utilizar divisas para importar alimentos que se producen en nuestro país”, explicaron desde el centro dirigido por el economista, Andrés Asiain.

La importación de leches y productos lácteos subió un 175% de 2015 a 2017, la cantidad de cebolla un 629%, y también se comenzaron a comprar productos que en 2015 no formaban parte del comercio exterior: manteca (394.488 kilos), batata (1.099.780 kilos), zanahoria (1.547.980) y naranjas (2.342.946).

Los especialistas de CESO concluyeron que el aumento de la importación de alimentos en un contexto de caída del consumo no significa más que reemplazo de producción nacional por producción extranjera.

“Estos datos confirman lo denunciado por distintas organizaciones de pequeños productores que definen una crisis en el sector productor por la apertura de las importaciones y la caída del consumo junto al aumento de las tarifas y la inflación”, añadie