Giuliano Galoppo: "Estoy muy agradecido con Javier Sanguinetti"

Giuliano Galoppo fue la gran revelación de Banfield en la última temporada de la Liga Profesional y de a poco, a fuerza de goles y buenas actuaciones, se convirtió en uno de los pilares del equipo de Javier Sanguinetti, quien le dio la gran oportunidad como titular y le permitió que se lo considera como una de las promesas del fútbol argentino.

Galoppo, que tuvo una grave lesión cuando tenía 19 años, se destacó desde el regreso a la actividad después de la suspensión de siete meses por la pandemia del Coronavirus y eso le permitió dejar en el olvido la rotura de ligamentos cruzados que había impedido afianzarse antes en primera.

"En ese momento, la pasé mal, estaba preocupado, porque me decían que podía estar ocho meses sin jugar y uno no sabe en qué condiciones vuelve. Por suerte, y gracias a los trabajos de los médicos del club, a los cuatro meses empecé a jugar en Reserva y tuve una buena recuperación. Nunca más volví a sentir molestias", remarcó el santafecino en diálogo con el sitio oficial del Taladro.

Esa lesión, justamente, se le produjo después de que jugó sus primeros cuatro partidos en el plantel de primera, cuando empezaba afianzarse en el plantel, y recién con la llegada del Archu pudo consolidarse como titular. Por eso, Galoppo siempre le estará "agradecido", ya que desde el primer amistoso ante Ferro lo colocó dentro de los once titulares. 

 "Sanguinetti es un gran entrenador y eso se demostró en el último año. Junto al cuerpo técnico, planifican muy bien los partidos, dicen por dónde le podemos hacer daño al rival y en lo personal fue el técnico que me dio la confianza, el que me hizo jugar de titular porque cuando llegó no era titular. Siempre le estaré agradecido", remarcó.

Por otra parte, el joven mediocampista central recordó sus primeros años en el club y comentó que hasta Quinta División, donde fue dirigido por Pico Hernández, no había sido titular. Justamente, a partir de esa temporada, todo cambió: fue goleador del equipo jugando de volante central y eso le permitió dar el salto a Reserva.

"En Sexta División me tocó alternar bastante y en los anteriores clubes en los que estuve (Boca y Atlético Rafaela) no había sido titular. Recién en Quinta pude despegar con un equipo en el que terminamos segundo y anoté 11 goles. Gracias a eso subí a reserva, donde estuve seis meses y después subí a primera", resaltó.

Por último, se refirió a su capacidad goleadora (sumó nueve goles en la última temporada y fue el máximo anotador del equipo) y concluyó: "Siempre me gustó hacer goles. De chico, jugaba más adelante y cuando llegué a Banfield lo hice como enganche. Después, al desaparecer esa posición, me tiré más atrás, pero siempre me gustó convertir. Creo que la clave es entrar convencido al área para que cuando te llegue la pelota, sea gol".