Innocence Project lanzó una campaña para pedir por la liberación de Marcos Bazán

El video dura apenas tres minutos y termina con una sentencia clara: "Queremos que haya justicia real para Anahí (Benítez). Libertad para Marcos Bazán". Quien está detrás de ese pedido es la fundación Innocence Project, que esta semana lanzó una campaña para pedir la absolución del hasta ahora único condenado por el femicidio de la estudiante del ENAM.

En tres días, desde su lanzamiento, el video cosechó casi 3,5 millones de reproducciones en YouTube. En él la organización intenta reflejar las inconsistencias y los errores que tuvo la investigación para llegar a la condena. Bazán fue sentenciado a cadena perpetua el 2 de junio pasado por el Tribunal Oral en lo Criminal N° 7 de Lomas de Zamora.

Para la organización "no hay ninguna evidencia física que demuestre dónde estuvo secuestrada Anahí y dónde fue asesinada". Y tal como lo vienen haciendo los abogados de Bazán, cuestionan que la Justicia se haya apoyado en la pericia del perro Bruno para incriminarlo y denuncian que no se siguieron otras líneas de investigación posible.

Apoyados en eso, los representantes de Innocence Project y otras organizaciones presentarán un "amicus curiae" para dar a conocer sus argumentos sobre por qué cuestionan a la evidencia utilizada para sostener el veredicto de la Justicia4. Será la Cámara de Casación Penal de La Plata la que deberá definir si revisa el fallo o deja todo como está.

¿QUÉ DICE EL VIDEO?

En el video, la organización asegura que "durante los días de la desaparición (de Anahí ), Marcos trabajó, se encontró con amigos, y recibió visitas en su casa, lo cual fue corroborado por testigos". Recuerdan que su casa fue allanada y "no se encontró nada relacionado con el caso", y que a partir de ahí el rumbo de la investigación cambió.

"A pedido de la fiscal, un guía y entrenador de perros de apellido Tula fue a la casa de Anahí. Tula llegó allí sin la Policía científica, tomó una prenda de ropa, la llevó a su propia casa y luego la utilizó para realizar una identificación de olores con uno de sus perros. No tuvo en cuenta los protocolos científicos exigidos", precisaron.

"Según Tula, el perro le indicó la presencia de olor de Anahí en la casa de Marcos Bazán, esto no fue confirmado por ningún otro rastrillaje ni por otros perros de rastro. No se encontró sangre ni ADN que vinculara ese espacio con el crimen ni a Marcos con Anahí pero a partir de ahí Marcos está detenido", agregaron.

Sin decirlo directamente desde la fundación consideran que "la presión por encontrar un culpable" desde la Justicia y desde los medios se hizo sentir, y ahí fue cuando cayó Bazán.

En cambio resaltan que la participación de Marcelo Villalba en el crimen fue mucho más clara: "Dos semanas después de la muerte (de Anahí) su celular se activó y permitió llegar a Marcelo Villalba. Una prueba de ADN demostró que había abusado de Anahí". Así y todo resaltan que "las nuevas pruebas no cambiaron nada, y Marcos siguió siendo acusado".

"Marcelo Villalba con la prueba de ADN en su contra, fue declarado no apto para ir a juicio. Marcos fue juzgado en solitario y sin que se investigara una serie de pistas que indicaran que Anahí había sido secuestrada por una red ligada a la trata de mujeres. Tampoco se puso en duda el accionar de la investigación aunque unos meses después del crimen la comisaría que intervino en el caso de Anahí fue investigada por su relación con prostíbulos y trata", detallan.

Desde Innocence Project lo que buscan con esta campaña es que la Justicia realice "una investigación seria" sobre el caso y que sean juzgados "los verdaderos responsables". "La utilización de perros de rastro específico ha sido catalogada como 'ciencia basura' por distintos expertos en el mundo y ha sido la causa de numerosas condenas erradas. La condena de un inocente como Marcos Bazán perpetúa la impunidad de los verdaderos culpables", cierran.