Lomense asesinado en Santiago del Estero: encontraron sangre en un auto
PISTA CLAVE. Las pericias demostraron que había restos hemáticos en un vehículo que pertenecía al tío del principal sospechoso.
Un hallazgo clave podría cambiar el rumbo de la investigación sobre el crimen de Marcelo Ferrufino, el vecino de Lomas de Zamora que fue asesinado y quemado en Santiago del Estero. Encontraron sangre en el auto de un familiar del principal sospechoso.
Por el asesinato está detenido Alexis Maldonado, socio de Marcelo, quien habría sido la última persona que lo vio con vida. En las últimas horas, se realizaron pericias en un auto que pertenece a un tío del sospechoso y los resultados sorprendieron a los investigadores: hallaron restos de sangre en diferentes lugares dentro del coche.
Los restos fueron identificados con la técnica de Blue Star, un reactivo que se usa para identificar restos de sangre que no pueden verse a simple vista. Se detectó sangre en el volante, en la palanca de cambios y en la alfombra.
El hallazgo alimenta la teoría de que el vecino de Lomas habría sido asesinado en otro lugar y luego trasladado al sitio donde apareció, en una zona montuosa entre las localidades de Mailín y Herrera. Esta semana seguirán los procedimientos y las indagatorias para intentar esclarecer el crimen del lomense.
Días atrás, se confirmó que Ferrufino recibió al menos seis machetazos en la cabeza que le provocaron la muerte. Una vez fallecido, quemaron su cuerpo para ocultar la evidencia.
EL CRIMEN
El comerciante de 54 años había viajado desde Lomas a Santiago del Estero, en el marco de la festividad del Señor de los Milagros de Mailín. Quería aprovechar ese evento para montar su puesto y subalquilar terrenos a otros feriantes. Hacía esta actividad desde 2006.
En medio del viaje, dejó de responder mensajes y llamadas a su familia. Preocupados, hicieron la denuncia por su desaparición. El caso tuvo el peor final: el cuerpo de Ferrufino fue encontrado calcinado en una zona montuosa ubicada entre las localidades de Mailín y Herrera.
Su socio, Alexis Maldonado, fue detenido luego de que la Policía notara contradicciones en su declaración: primero contó que Ferrufino se había ido sin avisar, pero después afirmó que habían salido juntos a comprar cerdos en Colonia Dora y que allí lo perdió de vista. Además de las inconsistencias en su relato, al allanar su casa encontraron pruebas que lo incriminaban: palas, un machete y ropa llena de sangre.