Crespo rompió el maleficio en Santa Fe: ganó Banfield
triunfo por la mínima.
En un partido malo y repleto de parates, el Taladro tuvo un arranque con lucidez y festejó el primer triunfo del año por un gol de Álvarez.
La quinta fue la vencida. En Santa Fe, el Taladro de Hernán Crespo logró el primer triunfo del año y cortó con el maleficio. Sin una gran producción, encontró el gol en el arranque y lo aguantó hasta el final para sumar de a tres.
El partido tuvo características muy similares a los otros encuentros que jugó Banfield hasta acá de la mano de Crespo. Un equipo que presiona alto, que busca la tenencia de la pelota, que tiene dinámica a la hora de atacar pero que sufre horrores cuando debe retroceder y defenderse.
En esta oportunidad encontró el gol en el amanecer del juego. A los 16 minutos, Dátolo recibió la pelota en la mitad de la cancha, apiló hombres entrando al área por la izquierda y metió un centro para que Álvarez la empuje.
Con la ventaja, el Taladro bajó la intensidad de todas sus acciones (sobretodo la presión que ejercía en el terreno Sabalero) y el local empezó a crecer. Con tres pases filtrados casi consecutivos a espaldas de Bravo, tanto Morelo como la Pulga Rodríguez desperdiciaron ocasiones claras de gol, Arboleda mediante.
Los problemas defensivos de otros partidos se repitieron con una línea que quedó expuesta individual y colectivamente ante una pérdida de pelota unos metros más adelante. Sin embargo, se pudo ir arriba al descanso en el marcador.
Dátolo, el jugador de más experiencia en el equipo junto a Civelli, fue el mejor de Banfield a lo largo del partido aportando pausa, precisión con la pelota y voz de mando dentro de un once que pudo jugar apenas un rato.
En el complemento, el partido estuvo constantemente cortado por cambios y lesiones. A los 23 minutos ya se habían hecho cinco cambios y Colón tuvo tres lesionados: incluso Fritzler debió seguir jugando pese a caminar en una pierna.
En un contexto bastante favorable (por el resultado y las dificultades que exhibió del rival), el equipo de Crespo no pudo hacer pie en ningún momento y perdió la posesión de la que había hecho gala durante algunos pasajes del primer tiempo.
Defendiéndose está claro que no es una luz y por eso por momentos sufrió los avances del Sabalero que, disminuido por lo antes mencionado, apenas exigió a Arboleda.
Banfield y Crespo sumaron la primera victoria del año, clave para consolidar una idea que de a ratos ilusiona al hincha.
