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El Rojo se llevó la victoria de Lanús y definirá en su casa

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25-08-2016_buenos_aires_leandro_fernndez_festeja

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Con goles de Leandro Fernández y Emiliano Rigoni, Independiente ganó el primer duelo de la Sudamericana ante el Granate y buscará el pase.

Independiente se llevó un triunfazo de arriba en Lanús en el choque por la Copa Sudamericana. Sin ser mucho más, aprovechó errores defensivos y ganó por 2 a 0. En la primera etapa, ambos padecieron la falta de precisión. Sin embargo, en esa tónica, Lanús fue el que más y “mejor” manejó la pelota.

El Granate logró desplegarse en el terreno de Independiente gracias al buen pie de Martínez y al desequilibrio de Acosta y Almirón. Estos dos, con corridas y gambetas, se acercaron al área del Rojo pero todo quedó en buenas intenciones. Los locales no llegaron con verdadero peligro y contaron con algunas chances aisladas de marcar.

La más clara estuvo en los pies de Ciro Rius, a los 31 minutos. El ex Defensa y Justicia prácticamente no había tocado la pelota. Independiente quedó mal parado, Miguel Almirón lo dejó sólo frente al arco e ingresando desde la izquierdo definió al lado del palo de Campaña. ¿Los de Milito? Poco y nada.

El Rojo no tuvo la pelota y cuando la recuperó, la perdió rápido. Los encargados de crear juego no estuvieron claros, los laterales no tuvieron ni tiempo de pasar al ataque, y los delanteros, lejos del área, chocaron y perdieron ante la defensa Granate. Ya en el complemento, el conjunto de Almirón se plantó decidido a abrir el marcador, pero la sorpresa la dio Leandro Fernández.

El delantero pescó una pelota mal rechazada por Braghieri tras un centro de Rigoni y sólo tuvo que empujarla ante un arco vacío para poner el 1 a 0. El resultado parcial puso al Granate en una situación incómoda y eso se tradujo en el juego. Dejó de ser claro en el manejo de la pelota y llegó cada vez menos. Acosta perdió peso en ataque,

Sand dejó de ser referencia. A eso se le agregó que, en la primera media hora, el partido estuvo constantemente interrumpido por lesiones y cambios. Todo a pedir del Rojo que, sin ser ampliamente superior, se acomodó y liquidó el resultado. Cuando se terminaba el partido, Silva cabeceó hacia atrás, se quedó corto y Rigoni, por encima de Monetti, definió con calidad. Con poco, el Rojo se llevó un triunfo vital para Avellaneda. Ahora, el cruce en el Libertadores de América será el 14 de septiem

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