Esta vez, la película tuvo un final feliz para el Milrayitas

En tiempo adicional, Linas anotó el 3-2 ante Gimnasia de Jujuy, y así Los Andes, de forma agónica, volvió a ganar de local tras cinco partidos.

Parecía que otra vez se iba de su estadio con un empate con sabor a poco; masticando bronca por no liquidar a tiempo un partido que no le traía complicaciones; con la misma escena final de películas anteriores. Pero esta vez, el desenlace fue diferente: en tiempo cumplido, de forma agónica, Los Andes consiguió el gol del triunfo y superó por 3-2 a Gimnasia de Jujuy para llegar a las 50 unidades y cortar una racha de cinco encuentros sin ganar en casa. El Milrayitas había hecho méritos para no sufrir ante un rival que propuso un partido trabado, con un solo punta y una zona media con cinco volantes. Eso lo destrabó rápido, a los 15 minutos, con un gol de Junior Mendieta, y empezó a dominar el partido, con un buen juego y frente a un equipo al que se le rompió el esquema y se quedó sin ideas. Los Andes lo pudo liquidar en dos jugadas claras en los minutos posteriores, pero falló en el último pase y luego lo pagó caro, con el empate que anotó Céliz a los 41 minutos tras un error cometido por los juveniles Díaz y Valdez, Pero como éste era mucho premio para la visita, a los 45, Vombergar, con un golazo, acomodó el trámite con el 2-1 a favor del local. La historia del primer tiempo se repitió en el complemento, y muchos empezaron a presagiar que la película de partidos anteriores, en los que Los Andes tenía la ventaja, no lo liquidaba y se lo empataban,  podía volver a repetirse. Y  algo de eso sucedió. Es que despuésde que el local desperdiciara algunas chances para tener un final tranquilo, a los 41 minutos, Díaz aprovechó un rechazo al medio del arquero local y anotó el 2-2 para enmudecer el Gallardón y desatar el enojo de los hinchas, que veían cómo al equipo se le escapaba otro par

tido que tenían controlado. Esta vez, el desenlace fue diferente: a los 48, luego de una jugada hilvanada y beneficiados por el desgarro de un rival, Linas conectó a la red un centro de Brítez Ojeda, y así el equipo volvió a ganar en su casa y empezó a respirar tranquilo.