Temperley volvió afilado y sumó tres puntos vitales

El Gasolero venció por 3-1 a Tigre y dio un buen primer paso para soñar con la salvación. Vázquez, Figueroa y Guevgeozian, los goles del local.

Debía ganar, y ganó. Necesitaba lograrlo con autoridad, y también lo consiguió. La urgencia de Temperley lo obligaba a redondear una actuación de esa magnitud y con el 3-1 frente Tigre, el equipo de Gustavo Álvarez dio el primer paso que deseó en la previa, con aspectos interesantes en el juego, para creer e ilusionarse con seguir en Primera División.

El Gasolero no podía dejar escapar puntos en su estreno de 2017, y menos en su cancha y ante sus hinchas. Ésa era la misión. Y con actitud, consiguió su cometido, gracias a los goles de los delanteros Vázquez, Figueroa y el uruguayo Guevgeozian, y así se sobrepuso a algunas dudas del inicio y liquidó el pleito minutos antes que finalice el encuentro.

El Celeste tuvo que recomponerse de un flojo comienzo, en el que estaba impreciso y sufría por la banda izquierda con las escapadas del colombiano Rincón y las proyecciones de Galmarini. Además, en esos primeros minutos, Ibáñez salvó dos veces su valla, la primera ante un remate peligroso de Morales y la segunda con un disparo desde lejos de Gurri.

Después del sofocón, con Di Lorenzo como estandarte del juego, el Celeste emparejó el partido, pero le costó gravitar y en la única que desniveló, convirtió ante la tibieza de la defensa de Tigre. El Tibu Vázquez, debajo del arco, empujó el balón a la red tras una jugada de Di Lorenzo, Figueroa y Mancinelli.

La ventaja trajo alivio y por eso, en el complemento, el local buscó mantener la diferencia conseguida. La receta no sirvió en los primeros minutos y a los 21, tras varias aproximaciones peligrosas desperdiciadas, Luna anotó el empate con un gol de cabeza que pudo significar un duro golpe para el local, pero pasó lo contrario.

El Gasolero reaccionó y atacó con más decisión en busca del triunfo. Así, a los 28, luego de un centro atrás de Ozuna, Figueroa definió en libertad y anotó el 2-1, en lo que fue un gol clave para reacomodarse después del empate de la visita y recuperar la confianza. El golpe final, con el que liquidó y cerró el compromiso, llegó a los pocos minutos, a los 33, con una media vuelta de Guevgeozian, que puso el 3-1 y desató el festejo del pueblo Gasol