23-09-2018

River anduvo a los bombazos en La Bombonera

Superliga Argentina de Fútbol. Con golazos de Gonzalo Martínez, que salió lesionado, e Ignacio Scocco, el Millonario impuso condiciones y le ganó por 2-0 a Boca como visitante, para prenderse en el torneo. En el mejor momento del local, el Millonario supo cerrar el Superclásico.

Scocco sacoacute un misil y liquidoacute el Superclaacutesico cuando Boca apretaba en busca del empate

Scocco sacó un misil y liquidó el Superclásico cuando Boca apretaba en busca del empate.

Carlos Tevez cubre la pelota ante la marca de Milton Casco.

River volvió a ganar en La Bombonera. Como en 2015, con otro golazo del Pity Martínez, al que se sumó otro de Nacho Scocco, para no ser menos.

Dos bombas que desarticularon a un Boca que no aprovechó los momentos que sí pudo resolver el Millonario, que con el 2-0, vuelve a acomodarse en la Superliga Argentina de Fútbol luego de cuatro empates consecutivos en el inicio.

Además, los dirigidos por Marcelo Gallardo llevan 29 partidos sin derrotas en los tres frentes que están disputando, además del torneo, la Copa Libertadores de América y la Copa Argentina.

El primer aviso fue del local, con un remate de Benedetto que Armani mandó al córner.

River mantuvo la presión alta sobre la salida rival. Encaró Palacios, su remate no pudo ser despejado por Izquierdoz, el volante trabó con Mas y la pelota derivó por el costado izquierdo, donde el Pity Martínez cargó la zurda y de volea le rompió el arco a Rossi. Como en el anterior Superclásico. Y también en el mismo arco, aunque en el otro palo.

Al ritmo del Pity, la visita dominó el partido y justificaba la ventaja que había obtenido. Pero en el mejor momento de la visita en el partido, Martínez dejó la cancha por una lesión en el isquiotibial izquierdo.

Boca trató de jugar en campo rival, pero no tenía espacios y cuando se le presentaba la ocasión, la resolvió mal o a las manos del seguro Armani. Antes del descanso, Cardona entró por Jara y Nández fue al fondo. El colombiano debió haber sido expulsado por un codazo a Enzo Pérez. Insólitamente, el árbitro Mauro Vigliano apenas lo amonestó.

Boca presionó en el reinicio, el estadio bramó por tres penales. Uno de Montiel a Benedetto, otro por mano de Ponzio ante tiro de Tevez. Y el último un empujón de Casco a Pavón. De todos, el que era sancionable fue el del lateral al delantero.

Era el momento del equipo de Guillermo, pero el Muñeco metió cambios y Scocco metió un fierrazo cruzado, inatajable para Rossi. La metió Quintero en diagonal para Borré, la pelota le rebotó larga y Nacho hizo el resto. Golazo y a otra historia.

Ahí se paró la euforia y reinó la calma. River supo que los tres puntos no se le iban a escapar. El travesaño, por cabezazo de Izquierdoz y Armani, manoteando otro de Mas, aseguraron el resultado. Y sí, el Millonario vuelve a los primeros planos de la Superliga.