Protocolos y delivery, los máximos aliados de las casas de comidas
BALANCE. Tres lugares emblemáticos hicieron un repaso del 2020 y contaron los cambios que tuvieron que implementar para hacerle frente a la pandemia.
El 2021 llegó para dejar atrás al 2020, un año que será difícil de olvidar por lo que la pandemia por Coronavirus causó en el mundo entero. Particularmente en Argentina, la cuarentena para tratar de evitar el crecimiento de contagios trajo problemas económicos en distintos rubros. Las casas de comidas tuvieron que rebuscárselas para continuar de pie y no bajar las persianas. Gusteau's Pizzería, Des Bok2 y Restaurante Mingo, tres lugares emblemáticos de Lomas, hicieron un repaso de 2020 y contaron cómo los protocolos sanitarios y el delivery se convirtieron en sus máximos aliados para trabajar y sobreponerse a la crisis, a la espera de un futuro mucho mejor con el 2021 que recién comienza.
Des Bok2 es una casa de comidas ubicada en Manuel Castro 61 (local 3). Federico Vecchio, uno de los trabajadores del lugar, admitió que los primeros meses de la cuarentena fueron "muy duros" ya que tuvieron que trabajar muy por debajo de la demanda que estaban acostumbrados.
De marzo a mayo estuvo difícil el rubro. Los clientes no aceptaban el delivery como alternativa por el miedo al contagio. De a poco, esa incertidumbre se fue diluyendo.
"De marzo a mayo estuvo difícil el rubro. Los clientes no aceptaban el delivery como alternativa por el miedo al contagio. De a poco, esa incertidumbre se fue diluyendo", añadió, en sintonía con su colega, Aníbal Olmos de Guseteau's Pizzería (con sucursales en Matheu 699 y Vergara 1700).
Lo cierto es que el delivery y las entregas puerta a puerta fueron opciones muy utilizadas para que las casas de comida puedan continuar con la venta y así generar ingresos. "El envío de comida fue una de las implementaciones que nos obligó a tener la pandemia. Por suerte fue redituable", dijo Vecchio, quien aseguró que de a poco volvieron a retomar el niel de trabajo que solían tener antes de la cuarentena estricta. En coincidencia con su colega, Daniel Cabral, encargado del Restaurante Mingo (Gorriti 461) agregó: "La gente de Lomas no nos dio la espalda y eso hay que agradecerlo. El delivery fue la única manera de mantener el lugar abierto".
La gente de Lomas no nos dio la espalda y eso hay que agradecerlo. El delivery fue la única manera de mantener el lugar abierto.
"La pandemia me obligó a reinventarme para subsistir. A lo que ya vendía le sumé las prepizzas y la muzzarela, que son más económicas, ya que muchos vecinos ajustaron los gastos porque no tenían los mismos ingresos", contó Aníbal.
Los protocolos sanitarios empezaron a aparecer en los distintos rubros con el objetivo de retomar, de a poco, la normalidad en los comercios. Alcohol en gel, distanciamiento y barbijo fueron una constante a lo largo de los meses de pandemia y aún continúan en vigencia para las casas de comidas. "El protocolo lo seguimos a rajatabla. Tenemos habilitada parte de la vereda y un 40 por ciento del salón para poder trabajar. Ojalá que la pandemia se resuelva pronto para volver a la totalidad de mesas y cubiertos", detalló Daniel, que invitó a los vecinos a comer en el local de lunes a sábado de 12 a 15.30 y de 20 a 23.30.
Los protocolos sanitarios empezaron a aparecer en los distintos rubros con el objetivo de retomar, de a poco, la normalidad en los comercios. Alcohol en gel, distanciamiento y barbijo fueron una constante a lo largo de los meses de pandemia y aún continúan en vigencia para las casas de comidas.
Para finalizar y a la espera que el 2021 sea completamente diferente, Aníbal hizo un resumen de lo que dejó el 2020: "Fue un año difícil para todos los argentinos, pero hay que rescatar que se hizo un esfuerzo enorme para tener salud y mantener la fuente de trabajo. No tenemos que bajar los brazos y luchar para salir adelante".