Sand no pierde su brillo en medio de un panorama con pocas luces
Eterno. Pese al mal momento del equipo, el veterano batallador siempre cumple con su cuota goleadora y es el espejo en que se reflejan los más jóvenes del plantel.
Dentro de un Lanús flaco de resultados en lo que va de 2020, hay una figura que difícilmente pase inadvertida. José Sand sigue demostrando su vigencia, no sola goleadora, sino también futbolística, porque los años no le son en vano y a los 40 corre como uno de los tantos chicos que conforman el plantel de Luis Zubeldía.
El Pepe es lo más destacable en este panorama sombrío del equipo, a pesar de que la clasificación a los octavos de final de la Copa Sudamericana maquille este momento. Desde que se reanudaron las competencias, el delantero marcó cinco goles en igual cantidad de partidos (tres por la Copa Liga Profesional y dos en la competencia internacional).
El oriundo de Bella Vista, Corrientes, marcó dos goles en la victoria ante San Pablo en La Fortaleza, uno en la derrota frente a Boca por la primera fecha del torneo doméstico y los restantes este último fin de semana en la derrota contra Newell's como local.
En un equipo que cambió rotundamente (en nombres y juego) desde junio a la fecha -pandemia por medio-, Sand brilla, corre, elabora jugadas, marca goles y se erige con la figura excluyente de un plantel que necesita regularidad, confianza y resultados. "Si (Luis) Zubeldía no me pone (contra Boca), lo mato", advirtió en broma, pero ratificando que siempre quiere estar presente, luego del desgaste que hizo en el Morumbí y antes de enfrentar al Xeneize.
La importancia de tenerlo todos los días es valorada por todos. Y uno de los jóvenes, como Lucas Vera, lo valoró: "Por suerte tenemos al Pepe que nos apoya mucho y nos banca, pero también nos hace correr, así que tenemos que estar a su altura, ya lo conocemos y tenemos que seguirle el ritmo porque es muy exigente".
El goleador histórico de Lanús, con 132 gritos en 206 partidos con la camiseta del club en tres ciclos diferentes continúa estirando su vigencia respecto al futbolista en convertir con mayor edad a los 40 años, tres meses y 28 días. Pensar que el Coronavirus le hizo replantear si seguía o no. Antes, tuvo una novela interminable con la directiva por la extensión de su contrato. Por suerte recapacitó. Y mientras tanto, seguirá pulverizando récords.
