Se cumple un año del crimen de Uriel Bejarano: ¿cómo está la causa?
ANIVERSARIO. Hoy se cumple el primer aniversario del asesinato del adolescente de 17 años, apuñalado cerca de las vías ferroviarias, en el barrio Santa Catalina.
El crimen de Uriel Bejarano, el joven de 17 años asesinado a puñaladas cerca de las vías de la estación de trenes del barrio Santa Catalina, cumple hoy un año, y su familia mantiene vigente el reclamo de justicia como el primer día, para que su caso no quede impune.
El presunto autor del hecho ocurrido el 28 de diciembre de 2022, está detenido con prisión preventiva, a la espera de ser juzgado por homicidio. Sin embargo, a pesar de que la causa ya fue elevada a juicio, y se sorteó el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 6 para estar a cargo, todavía resta saber la fecha y bajo qué modalidad se desarrollará el proceso judicial.
El sujeto identificado como Fabricio Luque, quien sería una persona dedicada a la venta de drogas, está acusado de atacar de manera sangrienta a la víctima, a quien hirió de muerte con un arma blanca y dejó abandonado en la calle. No obstante, antes de morir, Bejarano alcanzó a reconocer a su asesino.
Luque es el único detenido que tiene la causa, aunque para los familiares del adolescente, contó con la ayuda de su pareja, a quien consideran cómplice. "Dicen que ella anda por el barrio como si nunca hubiera pasado ni hecho nada", lamentó Jesica Bejarano, hermana de Uriel.
En diálogo con La Unión, la joven señaló que una de las dificultades en la investigación para atrapar al supuesto asesino giraron en torno al miedo que tenían los vecinos del barrio, que temían sufrir represalias si declaraban.
Según indicó Jesica, algunos de ellos llegaron a recibir amenazas, incluso los familiares de la víctima: "Amenazaron a la mamá de mi hermano y los familiares. Yo al principio recibí amenazas anónimas, pero no me importó".
El crimen de Uriel Bejarano
Uriel fue asesinado el 28 de diciembre del 2022, luego de que saliera de su casa, ubicada en Arana Goiri y Neuquén. Minutos antes, había arreglado encontrarse con una joven para que le venda algunas dosis de drogas, debido a que tenía problemas de adicción. No obstante, este encuentro se habría tratado de una trampa.
La mujer llegó al lugar con su novio, que atacó a Uriel con un elemento cortante. A pesar de que el adolescente trató de defenderse, sufrió graves heridas que le provocaron la muerte.
Antes de morir, le contó a una vecina cercana a la estación de Santa Catalina quién lo había apuñalado, mientras que el asesino escapó y estuvo prófugo hasta que lo detuvieron días posteriores en la villa 1-11-14, en el barrio porteño Padre Ricciardeli.