A 13 años de la partida de Sandro: el recuerdo de una "nena"
LEGADO ETERNO. Mabel Armentía sigue la música de Roberto Sánchez desde 1969. En cinco oportunidades pudo ingresar a la casa del artista, ubicada en Banfield.
Un día como hoy, pero de 2010, se apagaba la vida de Roberto Sánchez, o más conocido como Sandro, un artista que supo cautivar con su talento, su seducción y su sencillez a todo su público, mayormente femenino, a quien él mismo catalogaba como las "nenas". Mabel Armentía (64) es una de las fieles seguidoras y hace más de 50 años que sigue al cantautor, quien dialogó con Diario La Unión y recordó su relación con Roberto, a quien tuvo la suerte de conocer y ver varias veces en su casa de Banfield. Además, rememoró una perlita: la vez que Sandro la ayudó con un delicado problema de salud.
El fanatismo de Mabel comenzó en 1969 casi de casualidad, ya que su intención era ir a ver una película de Leonardo Favio y terminó en el cine disfrutando de "Quiero llenarme de ti", film en el que actuaba el artista. "Fue un flechazo. Ahí fue que empecé a seguirlo y a escuchar su música", rememoró.
En 1971 fue a la cancha de San Lorenzo para verlo por primera vez en vivo. "Sandro en el escenario era impresionante", dijo Mabel, aún maravillada, mientras que al año siguiente estuvo presente en el espectáculo que Sandro hizo en el Luna Park, siendo "el primer argentino solista en dar un concierto".
Sandro en el escenario era impresionante.
"Cuando lo empecé a seguir era una chica, una adolescente. Crecí junto a Sandro y con el paso del tiempo, a sus fans, él mismo nos llamaba sus nenas porque la emoción y el entusiasmo por su arte era el mismo", sostuvo Armentía.
Mabel solía visitar Banfield, más precisamente la casa de Sandro, ya que el artista tenía como costumbre, todos los 19 de agosto (fecha de su cumpleaños) salir a saludar a sus fans y compartir tiempo con ellas. "Desde el 2000 al 2007 dejó pasar a un grupo al interior de su casa, yo tuve la suerte de entrar a su hogar en cinco ocasiones", reveló la "nena".
Desde el 2000 al 2007 dejó pasar a un grupo al interior de su casa, yo tuve la suerte de entrar a su hogar en cinco ocasiones.
"Tuve mucha suerte, lo conozco personalmente y dialogué varias veces con él. Como mayor anécdota, que se puede ver en su serie, fue que Sandro me trajo un aparato que necesitaba por mis problemas asmáticos: en 1985 estuve muy mal y me internaron cinco veces, entonces me recetaron un artefacto que se conseguía en el exterior y fue Roberto quien me lo consiguió", describió, totalmente agradecida con el gesto y la preocupación del artista por su salud.
Tuve mucha suerte, lo conozco personalmente y dialogué varias veces con él. Como mayor anécdota, que se puede ver en su serie, fue que Sandro me trajo un aparato que necesitaba por mis problemas asmáticos: en 1985 estuve muy mal y me internaron cinco veces, entonces me recetaron un artefacto que se conseguía en el exterior y fue Roberto quien me lo consiguió.
Justamente, a causa de un problema delicado de salud, fue que Sandro se fue de este mundo el 4 de enero de 2010. "Ese día no me lo voy a olvidar nunca, seguí paso a paso su evolución y cuando me enteré de la noticia fue como si me arrancaran una parte de mi vida", se lamentó Mabel. Lo cierto es que el legado de Sandro está más vivo que nunca en cada "Rosa, rosa" o "Dame fuego", entre tantos éxitos que las "nenas" se ocupan de mantener vigente.