Construyen otra estación de bombeo para terminar con las inundaciones

La planta está ubicada en Otto Krause y la Ribera, en Lamadrid. La obra está en un 80% y podría estar lista en 30 o 45 días. Estará conectada a un sistema de desagües que se extiende a lo largo de nueve cuadras y beneficiará a 32 manzanas.

En Lamadrid, una zona golpeada por las inundaciones, el Municipio está construyendo una nueva Estación de Bombeo para terminar con un problema histórico de los vecinos. La obra se encuentra en su etapa final y podría estar lista en un plazo de 30 o 45 días.

La planta estará conectada con un sistema de desagües (que llevarán el agua de lluvia al Riachuelo) que se extenderá a lo largo de nueve cuadras y beneficiará en total a unas 32 manzanas en las que viven miles de familias.

El intendente de Lomas, Martín Insaurralde, destacó la importancia de este tipo de obras. “La nueva Estación de Bombeo se enmarca en una gran cantidad de acciones realizadas por el Municipio a lo largo de toda la cuenca. El plan busca solucionar el histórico problema de las inundaciones para mejorar la calidad de vida de todos los vecinos”.

En Otto Krause y la Ribera, a orillas del Riachuelo, las máquinas y los operarios están trabajando en la construcción de la estructura principal de la planta: según el subsecretario de Gestión Descentralizada Zona 3, Julio Riquelme, “se está instalando el colector principal de 1.300 milímetros y se están haciendo los encadenados para sellar todo. Eso va cubierto de hormigón y ahí se levantará la estación de bombeo, similar a la barrio Laprida”.

En el Delegación, en las últimas semanas, se entubó toda el área comprendida de Monte y Einstein a Otto Krause, y de Monte y Otto Krause a la Ribera. Esos caños estarán conectados a la estación de bombeo y, a través de ellos, el agua de lluvia irá directamente al Riachuelo. La red tendrá ramificaciones en cada esquina y llevará el agua de los alrededores hasta la planta.

La estación tendrá una bomba y contará con una capacidad de 100 mil litros por hora. Una vez que el nivel de la Cuenca Matanza Riachuelo suba y supere los 1,70 metros, la planta activará el cierre de las compuertas para impedir el desborde y que el agua ingrese al barrio. En ese momento, se pondrán en funcionamiento las bombas.

El sistema estará acompañado también por canales de descarga, vertederos y otros compartimientos complementarios. El proyecto se puso en marcha a raíz de “una inundación muy grande que hubo en la zona tres años atrás”, contó Riquelme.

El delegado de Lamadrid, Héctor Ontivero, acotó que, a pesar de todo, a partir de una serie de trabajos que se hicieron últimamente, de Newton a las Vías -donde está el canal Mugica- y de Epecuén a la Ribera “no se inundó más”.

Los vecinos se encuentran expectantes ante la finalización de la obra. Edith Álvarez, que vive en el barrio hace aproximadamente diez años con sus tres hijos y su marido, señaló: “Espero que esto sea una solución definitiva.

Durante muchos años sufrimos las inundaciones y tuvimos el agua por las rodillas. Ojalá con esto el problema del agua sea una cosa del pasado y podamos vivir con tranquilidad