Por dos errores groseros, el Gasolero sufrió otro golpe
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Temperley cometió un par de fallas graves en defensa y San Lorenzo, sin ser mucho más, lo aprovechó y se quedó con la victoria en el Beranger.
Temperley pagó muy caro dos errores que cometió en defensa e hilvanó su tercera derrota en fila en la Superliga, en un partido en el que, por situaciones generadas, pudo aspirar a algo más.
San Lorenzo, sin mostrar una gran imagen, aprovechó los dos regalos de la defensa gasolera y se llevó los tres puntos del Alfredo Beranger.
El primer error fue en una salida, a los 13 minutos, cuando el partido aún se estaba armando y todavía no tenía un dominador claro, pero en el que el Celeste ya había tenido dos aproximaciones (un cabezazo de Arregui y un remate cruzado de Figueroa).
Gracias a esa falla compartida entre Lugo, Figueroa y Riveros, en la que no se cedieron con prolijidad la pelota, el Ciclón encaminó el partido a su favor, con el gol de Gudiño, quien enfrentó sólo a Ayala luego de que Blandi apretara a Riveros cuando éste se tiró al piso con la intención de rechazar un balón complicado.
El Gasolero, con el gol en contra, se vio obligado a dejar espacios en busca del empate y así el Ciclón tuvo algunas aproximaciones para liquidar la historia, teniendo a Belluschi en un buen nivel y siendo eje del equipo.
Justamente, cerca del cierre de la etapa inicial, el ex Newell’s sacó un violento remate de volea que exigió una gran respuesta de Ayala.
Previo a eso, entre el gol de Gudiño y la chance de Belluschi, el Celeste, con más ganas que ideas claras, se acercó con peligro y la más nítida fue un remate cruzado de Montagna (luego salió lesionado por un esguince de rodilla) que Navarro contuvo con los pies.
En el complemento, San Lorenzo decayó en su rendimiento, no estuvo fino en la generación de juego y Temperley, apuntalado por el empuje de Arregui, el corazón de Escobar y algunos destellos de Lugo, tuvo cuatro situaciones: un cabezazo desviado de Riveros, dos remates de Costa (uno se fue por encima del travesaño y en el otro lo tapó Navarro) y un centro rasante de Pinto que desvió Villasanti y el 1 del Ciclón la mandó al córner.
Con esto, el Gasolero se acercaba al empate, por lo menos lo merecía, pero otro grosero error lo condenó a perder. Pinto se durmió cuando cuidada que la pelota se vaya, Blandi lo anticipó y tiró el centro atrás para que Cerutti, sin marca y con un Ayala desarmado, defina a la red y liquide la historia.
Temperley otra vez pagó caro los errores defensivos y la poca efectividad que tiene en el área rival y sufrió otra caída que no lo deja salir del fo