La Unión | DEPORTES

Lucas Ortiz: “Los recuerdos que tengo son los mejores”

.

El jugador de Temperley y con paso por la Liga Nacional se formó en el Juventud Unida y recordó aquellos años. “Allí viví cosas hermosas”, dijo.

Juventud Unida siempre fue un club que se destacó en la formación de jugadores de básquet. En su rica historia en la disciplina, formó a varios basquetbolistas y algunos llegaron al primer plano nacional, como es el caso Lucas Ortiz, quien dio sus primeros pasos en la cancha del Juventud y hoy, luego de una gran trayectoria, se destaca en Temperley en la Liga Argentina. El experimentado base tuvo sus inicios en la disciplina dentro del club de su barrio, en el que aprendió los primeros movimientos, tuvo su primer contacto con el balón naranja y empezó a quererlo. Desde ahí, inició su camino e hilvanó una fructífera carrera, con participación en la Liga Nacional y en la Liga Argentina, ex TNA. “Tengo los mejores recuerdos de aquellos años en el club. Ahí pasé gran parte de mi infancia, casi 20 horas por día. Es un club al que quiero mucho y del que guardo cosas muy lindas. Con mis hermanos, vivimos ahí adentro”, comentó Ortiz, con cierta nostalgia. “Son muchas las cosas vividas. Me encantaba estar ahí no sólo porque compartía momentos con mis hermanos y amigos, sino porque además toda mi familia estaba ahí. Mi papá fue entrenador del club por muchos años y por eso hay un vínculo especial que me une a la institución”, agregó Ortiz, hoy figura del Gasolero y con pasado en Boca y Quilmes de Mar del Plata. A lo largo de su carrera, el base y también escolta se coronó campeón de la Liga Nacional con el Xeneize en la temporada 2003-2004 y después jugó en Ben Hur de Rafaela y el Quilmes marplatense, con el que logró el ascenso a la Liga Nacional en la 2012-13 y luego formó parte del plantel en la máxima categoría durante dos temporadas. Hoy, después de una larga carrera, a sus 30 años, Ortiz volvió a instalarse cerca de sus orígenes, en el club Temperley, del cual es hincha, y también más cerca del Juventud Unida, de donde se formó y al cual consideró un club “histórico” de Llavallol. “A veces paso y lo veo cambiado en relación a cuando era chico, pero soy consciente que a los clubes de barrio se les complica, no es fácil mantener sus estructuras, y sé que los que trabajan ahí hacen un gran esfuerzo para tenerlo bien. Eso es lo más valioso”, comentó el experimentado base. En el Juventud Unida, Ortiz dio sus primeros pasos y empezó a escribir su historia en el básquet. Y como lo hizo él en aquel momento, muchos chicos también hoy comienzan a escribir la suya. Es que a pesar de los años, la cancha del Juve sigue siendo un cuna de grandes basquetbolistas.

Temas Relacionados