Lanús, sin respuestas, cayó por goleada contra Talleres
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El Granate estuvo en cancha hasta la jugada del penal, que originó el segundo tanto cordobés. Después, el local aceleró hasta llegar al 5-2.
Lanús no tuvo un feliz comienzo en la Superliga. En Córdoba, Talleres le ganó por 5-2 en forma merecida. El equipo de Jorge Almirón se derrumbó después del penal (si hubo falta de Braghieri a Palacios fue afuera del área) y una jugada desafortunada de Pasquini sentenció la suerte del Granate en el Mario Kempes.
En el primer tiempo se notaron dos equipos apurados, con mucha verticalidad y poca pausa. Talleres volcó su ofensiva por la izquierda, con Menéndez superando a Carrasco. El delantero tuvo su chance, que Monetti sacó en el primer palo.
Sin embargo, la efectividad casi le da la derecha al visitante. Primero el remate de Román Martínez se estrelló en el poste izquierdo y luego del tiro de Silva lo devolvió el travesaño.
En el juego, por iniciativa y ansiedad, la T era quién más se mostraba seguro, pero tuvo que esperar al complemento para llegar a elaborar una goleada algo impensada. A los siete minutos, el uruguayo Arias capturó un rebote en el palo para la apertura. Pero enseguida lo empató Martínez, con un cabezazo, tras una salida en falso de Herrera.
El error de Vigliano que derivó en el penal que convirtió Palacios sacó del partido a Lanús. El tucumano volvió a sacudir la red, tras un esfuerzo de Monetti ante un fuerte pase de Pasquini hacia atrás. Jorge Almirón no podía tió Palacios sacó del partido a Lanús.
El tucumano volvió a sacudir la red, tras un esfuerzo de Monetti ante un fuerte pase de Pasquini hacia atrás. Jorge Almirón no podía creer lo que veía. Además, las salidas de los laterales Velázquez y Carrasco (retrocedieron Pasquini y Silva) terminaron por desnaturalizar lo poco que el Granate estaba mostrando.
Un enganche de Menéndez ante Silva y gambeta a Monetti, levantó la euforia del público cordobés con el cuarto grito. El descuento de Denis y el quinto del local a cargo del Chelo Torres, cerraron la goleada.
Un segundo tiempo de alto vuelo emotivo, que se desvirtuó con la jugada del penal, pero que no empañó los merecimientos que realizó el equipo de Kudelka para mantener vivo el fútbol que supo mostrar durante la temporada pasada. Lanús, si bien tiene la cabeza en la Libertadores, debe reponerse lo antes posible. Y la próxima parada será frente a Boca en La Fortal