El rock argentino cumple 50 años desde “La balsa”

Hace medio siglo Los Gatos editaban ese éxito. Litto Nebbia y Tanguito compusieron la canción en el baño de La Perla de Once, una madrugada de 1967, en plena dictadura de Onganía.

Todo comenzó entrada la madrugada del 2 de mayo de 1967 cuando los jóvenes Litto Nebbia y Tanguito, nacido como José Alberto Iglesias, enfilaron para el baño de hombres de la pizzería La Perla del Once, ubicada en la cruce de las avenidas Rivadavia y Jujuy.

“Estoy muy solo y triste acá en este mundo de mierda”, fue la frase que Tanguito tenía compuesta y Litto, con la capacidad compositiva que ya lo acompañaba desde su adolescencia, completó la letra y la música en el acto, de un tirón.

La Perla era frecuentada por estudiantes universitarios que se reunían allí para preparar sus exámenes. Aquellos rockeros que le pusieron las bases al movimiento artístico argentino caían en ese bar por era uno de los pocos que abría toda la noche.

El baño era el lugar indicado para mostrar sus canciones y sus ideas musicales, porque en el salón se debía guardar silencio para no molestar a los concentrados universitarios y que osaba romper el mutismo con una guitarra era puesto de patitas en la calle.

A NAUFRAGAR. Poco después de componer “La Balsa”, Los Gatos la grabaron el 19 de junio y fue lanzada el 3 de julio de 1967, en pleno Onganiato, una fecha clave del rock argentino de la que mañana se cumple exactamente medio siglo.

Aquellos náufragos habían pactado que el primero que grabe incluya algún tema de sus colegas, como una suerte de construcción colectiva por eso, ese simple tenía en el lado A a “La Balsa” y en la otra cara a “Ayer nomás”, de Pipo y Moris.

Sin el “mierda” en la letra por la censura imperante en aquellos días, el simple tuvo un frío arranque comercial hasta que se convirtió en breve en un furor, superando los 250 discos vendidos, un verdadero récord.

Los Gatos, además del talento compositivo y de la original forma de cantar de Litto, era una banda sólida y que aún suena actual. Ciro en los teclados, Kay en la viola, Alfredo en bajo y Moro en batería completaban el quinteto.

“La Balsa”, si bien es una canción de rock, el propio Nebbia le encuentra una candencia cercana a la Bossa Nova y hasta se hace cargo de alguna influencia de “Garota de Ipanema” en la composición.

Como se estilaba entonces, los nuevos grupos tenían que pasar la prueba de fuego de grabar un simple, antes de llegar a un Long Play. Este furor les permitió a Los Gatos grabar su álbum debut, que los transformó en una las bandas más populares de América latina.

A pesar de que se pueden rastrear otros antecedentes, “La Balsa” con menos de tres minutos de duración puso la piedra basal del rock argentino, aunque por entonces ni ese nombre tenía a