Reconocen a una vecina de Lomas por su trabajo social en el barrio

Valor local . Teresa Nazer, fundadora del Comedor Ale y Darío de Santa Marta recibió una distinción a la mujer trabajadora por su trayectoria de más de 20 años en la acción solidaria.

Con más de 20 años de trabajo social a través del Comedor Comunitario Ale y Darío, la vecina Teresa Nazer (63) del Barrio Santa Marta, recibió un reconocimiento a la Mujer Trabajadora por parte de la Comisión de Asociados del Banco Credicoop, filial Lomas de Zamora.

La premiación se realizó en el marco del Mes de la Mujer tenía el objetivo de elegir personas del género femenino destacadas por su labor solidaria en la zona. Teresa recibió su premio muy emocionada y admitió que no se lo esperaba: "Para mí es un orgullo, aunque nunca inicié este camino esperando un reconocimiento porque desde muy chica quise tener el comedor y trabajar para la gente que lo necesita porque yo pasé por mucho sufrimiento desde muy chica", aseveró Nazer, que continúa trabajando para asistir a las mamás y a los niños que llegan al espacio ubicado en Neuquén 13, Barrio Santa Marta, para recibir mercadería, un plato de comida o la merienda.

"Entre todos construyendo un futuro solidario", es el nombre de la iniciativa que convocó a Nazer con el objetivo de reconocer el trabajo que realiza hace tanto tiempo.

Teresa sufrió mucho durante su infancia la falta de alimentos y cuando creció también tuvo que pasar por situaciones de violencia de género con una de sus parejas, por eso siempre tuvo en mente la creación de un lugar que pueda ayudar, que la gente pueda recibir esa contención que ella no tuvo.

"De niña cuidaba mis hermanitos, después me obligaron a casar por el civil porque quedé embarazada cuando tenía 14 años. Él era un borracho golpeador, pero luego logré escapar con mis 4 hijos de ese matrimonio: Carlos, Freddy, Mercedes y Romina", relató durante el evento.

A los 23 años conoció a su actual marido que se llama José con el que tuvo dos hijos (Juan y Alejandro) y él la ayuda constantemente a llevar adelante el comedor del barrio que es ese lugar donde han pasado varias generaciones, chicos que crecieron y vuelven al encuentro de Teresa junto a sus hijos.

"Desde el comedor siempre hacemos campañas distintas porque cuento con el apoyo de los padrinos solidarios que siempre están ahí para brindarme una mano en esa labor social", detalló Teresa y contó que ella siempre se manejó de la misma manera: "Toda donación que llega se entrega en el momento porque sé que hay lugares que no cumplen con ese compromiso de colaborar con los que menos tienen y me prometí a mí misma actuar siempre de la misma forma porque de chica yo misma veía que vendían en ferias lo que la gente donaba".

Aunque muchas veces esos padrinos solidarios de los que habla Teresa juntan grandes sumas de dinero para colaborar con el espacio, ella nunca quiere la plata.

"Siempre pido algo para los chicos porque la que pide en realidad es esa Tere niña y trato de volver a ella para sentir lo que necesitaba cuando era chica y así surgió la campaña de higiene personal en que pedí que compraran para los nenes jabón, peine y cepillo para que cada uno tenga su kit propio y personal", recordó.

Otra de las campañas que son sumamente necesarias es la de la merienda porque se encarga de juntar mercadería para repartir o de hacer ella misma las botellas de leche, té o mate cocido para que compartan con la familia.

Siempre pido algo para los chicos porque la que pide en realidad es esa Tere niña y trato de volver a ella para sentir lo que necesitaba cuando era chica y así surgió la campaña de higiene personal en que pedí que compraran para los nenes jabón, peine y cepillo para que cada uno tenga su kit propio y personal

"Cada campaña, cada entrega de donaciones es para mi como sanar heridas, esa Teresa niña va curándose de a poquito gracias a esta labor que emprendí hace tantos años", concluyó la vecina que saca las mesas a la calle para poder juntar a los chicos y servir las meriendas ya que su espacio no cuenta con las comodidades necesarias bajo techo para recibir a tantos concurrentes.