Cristian Quiñonez y el sentido de pertenencia de las inferiores de Temperley

ENTREVISTA. El coordinador de las divisiones juveniles del Gasolero destacó el gran presente que atraviesan las categorías de formación de Club.

Cristian Quiñones comanda las Divisiones Inferiores de Temperley

Crédito: Prensa Temperley

Cristian Quiñones comanda las Divisiones Inferiores de Temperley.

Las divisiones juveniles de un equipo son el primer paso que un futbolista profesional debe dar para luego de escalar, distintas categorías, llegar a la primera división de un club de fútbol. Y Temperley es uno de los elencos que vienen realizando un muy buen trabajo con esa premisa, actualmente a cargo de Cristian Quiñonez, ex futbolista del club que sabe lo que es el sentido de pertenencia y conoce el ADN del Celeste

Y los resultados están a la vista: en el último tiempo, muchos de los jugadores surgidos se destacan en el primer equipo del Gasolero, son reconocidos, y otros alimentan a elencos de la Primera División del fútbol argentino. Al final de la primera etapa, en el Campeonato de Divisiones Inferiores de la Primera Nacional Juveniles AFA, Temperley fue tercero sobre 24 equipos, con la valla menos vencida y siendo el equipo con menos derrotas en 138 encuentros.

En una entrevista al Diario La Unión, el Coordinador de las Divisiones Inferiores conversó de todo y destacó la labor realizada en la "cantera" del Gasolero

-¿Cómo está la actualidad de las divisiones inferiores de Temperley?

-Terminamos terceros en la Tabla General de juveniles, hay varios jugadores en Primera, muchos chicos con expectativas para que suban de categoría porque su rendimiento así lo amerita y en cualquier momento se les va a dar la oportunidad. Estamos teniendo hechos históricos para el Club: tenemos un jugador -César Flores- que jugó el Sudamericano Sub-17 para Bolivia, otro premiado para los premios Alumni como 'Revelación del Ascenso' que es Lautaro Torres -goleador de la 4ta. con 16 tantos-, Agustín "Piqui" Toledo con protagonismo en Rosario Central. Son varias cosas que dan a entender que estamos por el buen camino.  

-¿Cómo se arma un proyecto serio donde los pibes pueden alimentar a otros equipos de Primera División?

-Soy un convencido de que todos los clubes tienen las mismas posibilidades. Solo sacan ventajas y mejores jugadores los clubes que tienen mejores condiciones de trabajo y entrenamiento, con mejores pisos, que les pagan mejor a sus entrenadores, no hay misterio. Por algo Lanús, River, Boca, son quienes mandan en el fútbol juvenil. Es un momento en el que se debe invertir. Estamos en ese proceso. 

-¿Cómo se hace para retener a un pibe de inferiores en el futbol actual?

Es difícil retener a los chicos, pero no imposible. Siento que, en nuestro caso, los retenemos desde el lado humano. Tenemos un muy buen trato con los jugadores y respeto total hacia ellos, se sienten contenidos. Todo lo que el Club puede, se lo damos y no mezquinas en nada con ellos. Los jugadores de las inferiores se mueren por jugar en la primera de Temperley, y luego sí hacer su carrera en donde contamos con un hándicap importante. 

-¿Es un partido ganado?

Si, es un sentido de pertenencia, buena elección de entrenadores, son bien tratados desde que vienen a infantiles y sienten que no son menos que nadie. En juveniles, sentimos lo mismo. Lamentablemente, tenemos menos condiciones que otros para desarrollarlos, pero no somos menos. A partir de ello, que haya muchos ex jugadores del club trabajando en inferiores y que sepamos el ADN de jugadores que le gusta al hincha 'Gasolero' nos resulta fácil"

-¿Cómo se logra dar ese sentido de pertenencia?

Es un trabajo artesanal de día a día, y en Temperley le damos todo lo que tenemos. Ellos los siente que le damos todo. Con Franco Ayunta me pasa algo especial, porque una de las cosas que me pasó cuando llegué me tocó recibirlo cuando lo habían bajado de primera y no me habían avisado. Lo primero que le dije fue 'tuviste un golpe, lo tenés que asimilar, vas a estar mal un tiempo, vamos a trabajar y dentro de varios meses vas a subir a primera'. Fue un trabajo y se logró. 

-¿Cómo es el proceso que hace un futbolista para atravesar un momento de bajo rendimiento?

Los que fuimos futbolistas tenemos ventaja porque nos pasó, después el tema pasa por acordarse y saber qué se hizo y nos dio resultado. Uno trata de compartir sus experiencias y tratar de que el otro sepa por donde va a venir porque eso me pasó, alguien me dijo y funcionó. Tenemos una psicóloga que trabaja todos los días, no un departamento psicológico y varias cosas, pero sí la parte humana. Los dirigentes siempre estamos cerca del jugador, cuando vemos que tienen una necesidad, por ejemplo, botines siempre aparece.

-¿Cuánto la aporta a Temperley que las inferiores estén conducidas por ex ídolos del club?

 Aporta un montón. Todos tienen una capacidad bárbara que le hacen tener un plus. Mientras yo esté, no va a trabajar alguien porque haya jugado en el club, sino si está capacitado y estas personas lo están. Lo que está dando (Mariano) Campodónico, (Federico) Crivelli, (Gastón) Aguirre cuando era técnico de Reserva, (Emiliano) Giannunzio que está tratando de hacer un nexo con primera, (Gabriel) Ostúa, Atilio Valdéz es un plus increíble. Veo un compromiso que no es normal, solo falta tiempo. Hay que decirlo y hacerlo, ese paso estamos a punto de lograrlo, el convencimiento tiene que ser total.