Día del Gráfico: cuatro generaciones y un oficio vivo en Lomas

EL ARTE DE IMPRIMIR. Fernando Mura trabaja en su taller reparando y creando maquinarias gráficas. El empleo lo heredó de su abuelo y su padre, al punto de trasmitírselo a sus hijos.

Todos los 7 de mayo se conmemora en Argentina el Día del Trabajador Gráfico, en homenaje al nacimiento de Eva Perón, quien fue la que intervino para que se firme el Primer Convenio Nacional para los trabajadores de la industria gráfica. Fernando Muro (66) se dedica a la gráfica y el oficio lo obtuvo por herencia familiar, más precisamente por su abuelo y su padre: dialogó con el Diario La Unión y contó cómo es su labor con el paso de los años, aggiornándose a las nuevas tecnologías, pero sin descuidar lo aprendido por sus antepasados.

"Mi abuelo, en España, adquirió el oficio de tipógrafo entre fines del siglo XIX y principios del siglo XX. Su mamá fue quien le propuso que se dedique a ese trabajo, ya que no lo veía como para realizar labores en la campiña", contó Muro sobre los primeros contactos con la imprenta en el linaje familiar, historia que luego remontaría en Lomas.

Mi abuelo, en España, adquirió el oficio de tipógrafo entre fines del siglo XIX y principios del siglo XX.

Con el oficio bien establecido, el abuelo de Fernando se fue a trabajar a Alemania, donde se enamoró y tuvo un hijo. "Mi abuelo y mi papá se vinieron para Argentina. Pasados unos años, puso su propia imprenta en Capital e importó sus máquinas para seguir perfeccionándose", sostuvo, y rápidamente explicó que su abuelo trabajó hasta la década del '80, mientras que su padre siguió el mismo camino y tomó la posta familiar.

"Mi papá se dedicó a la mecánica y a la instrucción de nuevas maquinarias, siempre dentro del rubro. Capacitaba a gente en el uso de impresoras automáticas, que reemplazaron a las manuales", resaltó Fernando, quien nació en Tristán Suárez, pero que cuando tenía dos años se mudó a Lomas.

Y fue justamente el padre de Fernando quien se estableció en Lomas en 1969, cuando adquirió un taller en Rivera 1288. "El local fue instalado para la reparación y el reacondicionamiento de máquinas usadas, además de ser usado como depósito de nuevas maquinarias que venían de Europa y Asia", dijo Muro.

El local fue instalado para la reparación y el reacondicionamiento de máquinas usadas, además de ser usado como depósito de nuevas maquinarias que venían de Europa y Asia.

Fernando, por su parte, incursionó en el oficio de la mano del ófset, una técnica de impresión más moderna y que continuó a la litografía: la imagen pasa a un paño y luego a un papel, proveniente de la antigua litografía, más conocida como impresión en piedra. "El ófset consiste en una impresión muy delicada, con un punto refinado, pero para eso pasaron años de evolución. Hoy, reina el ófset y las más grandes ediciones se hacen con esta técnica", contó el especialista.

"Hoy en día hago de todo un poco, lo de antaño y lo moderno. Fernando Muro se aggiornó y llegó a la flexografía y al troquelado rotativo", reveló sobre su labor en el mismo taller en el que trabajaba su padre.

Hoy en día hago de todo un poco, lo de antaño y lo moderno. Fernando Muro se aggiornó y llegó a la flexografía y al troquelado rotativo.

Cabe resaltar que fue Johannes Gutenberg, orfebre alemán, quien inventó la imprenta moderna con tipos móviles, hacia 1450. "Eso fue un antes y un después en la imprenta, haciendo que sea ágil la impresión de un libro para combatir el analfabetismo, algo impensado con el formato manual", enfatizó Fernando.

"En nuestro taller tenemos herramientas para fabricar máquinas nuevas. Mis hijos también se dedican a la mecanización de máquinas gráficas y la tradición continúa", cerró, con gran orgullo.