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Caso "Pastelito": reclaman por la declaración de un testigo clave

judiciales. Se trata del otro adolescente que lo acompañaba la madrugada en que fue el hecho. Todavía no hay ninguna persona detenida.

Tenía 14 años cuando fue asesinado

Tenía 14 años cuando fue asesinado.

La familia de Matías Castillo, el adolescente de 14 años que fue asesinado de un disparo tras una pelea en Parque Barón, reclama por la declaración de un testigo clave en el caso.

En diálogo con La Unión, la tía de "Pastelito" -como apodaban sus seres queridos a Matías- apuntó que la causa no avanza porque el joven de 15 años que acompañaba a su sobrino la madrugada en que ocurrió el hecho, no prestó declaración aún ante la fiscalía. 

"Falta la declaración de él, que es el testigo clave de todo", manifestó la mujer, acerca del muchacho que ya fue citado a declarar al menos dos veces. Asimismo, denuncian que sus padres no sólo no prestan colaboración, sino que entorpecen la investigación.

"Ya estamos cansados de que la familia de E. nos mienta, porque los padres dicen que van a colaborar y no colaboran en nada", exclamó y remarcó: "Falta sólo él para terminar el rompecabezas".

El joven, horas más tarde del hecho, planteó ante la Comisaría 9na de Parque Barón que el conflicto comenzó a partir de un botellazo que les habrían tirado un grupo de chicos al salir de una fiesta. Lo que desmentía la versión de un intento de robo, que rápidamente se había difundido en varios medios.

La causa se encuentra caratulada como "Homicidio y lesiones graves". En la misma, interviene el fiscal Gerardo Loureyro, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 de Lomas de Zamora.

Al momento, ya hubo varios allanamientos por la zona de Parque Barón pero los mismos arrojaron resultado negativo. Todavía no hay detenidos.

EL HECHO

En la calle Bustos al 800, efectivos de la Comisaría 9na arribaron al lugar luego de haber sido advertidos del hallazgo del cuerpo de un joven sin vida sobre el asfalto. La víctima se encontraba en posición cúbito lateral izquierda, con una gran pérdida de sangre.

En tanto, el otro joven que había resultado herido, su amigo de 15, había sido trasladado al Hospital Luisa C. Gandulfo con un disparo en la axila derecha.

Horas más tarde, éste se presentó a declarar ante la Policía para aclarar el hecho, y precisó que todo comenzó cuando aquel 9 de enero se encontraba junto a un grupo de amigos, entre ellos, Matías, en la intersección de Pampero y Terrada tomando bebidas alcohólicas.

El muchacho planteó que habían decidido ir a dar unas vueltas en moto, y que pasaron por una fiesta circulando por Uspallata y Arana Goiri. Fue entonces que vieron a dos hombres. Uno de ellos llevaba una botella de vodka, la cual revoleó intentando herir a Matías, pero que terminó golpeando el espejo de la motocicleta.

Los jóvenes regresaron con sus amigos, y les comentaron lo ocurrido y junto a ellos, y en otras motos, deciden dirigirse al mismo lugar donde lo quisieron golpear con la botella. Luego de dar varias vueltas, se volvieron a cruzar a los dos sujetos del conflicto a pie, a quienes comienzan a seguir en las motos. Éstos se percatan y corren en distintas direcciones.

El joven de 15 y Matías siguieron a unos de ellos, quien salió corriendo por la calle Olamos. Fue al doblar en Bustos, cuando el adolescente de 14 años saltó de la parte trasera de la moto hacia el sujeto "con intenciones de interceptarlo y vengarse de lo antes sucedido". De forma simultánea, el sujeto comenzó e efectuar disparos de arma fuego contra ellos, observando que Matías cae desplomado en suelo herido, mientras el otro joven fue herido.

El agresor se terminó fugando. Asimismo, de acuerdo al testimonio del joven, no se conocían previamente.