La muralista de Ezeiza que volvió a plasmar su arte en las escuelas públicas
a pesar de la pandemia. Ángeles Crovetto vive en Canning y asegura que cuando retomó la actividad artística, gracias a un proyecto municipal, sintió un "efecto de liberación" es su espíritu. "Disfruté la vuelta al trabajo", expresó.
Volver a sentir el sol en la cara mientras plasma su arte en una pared de algún barrio es lo que añoró por algunos meses, la licenciada en Artes Visuales, escultora y muralista, Ángeles Crovetto que vive en Canning y hoy trabaja en un proyecto artístico junto al Municipio de Ezeiza. Tras el parate por la pandemia logró retomar la labor con autorización especial.
El aislamiento social perjudicó a muchos rubros y uno de ellos es el arte. Por eso, Ángeles tuvo que dejar a medio terminar el proyecto que comenzó el año pasado junto al Municipio de Ezeiza para embellecer las escuelas públicas con murales en sus frentes.
"Por suerte he tenido la posibilidad de pintar murales en todo el país y en distintos distritos, pero desde el año pasado comenzamos con la muni con esta iniciativa que logramos retomar porque los casos en Ezeiza son bajos", explicó y aseguró que la vuelta al trabajo la reconfortó.
"Soy una agradecida de volver a trabajar y lo que me pasó es que sentí un efecto liberador cuando retomé la actividad", aseguró la artista que hoy trabaja en una escuela ubicada en Tristán Suárez.
No sólo para ella fue un incentivo la vuelta al arte, también para aquellos que la observan trabajar sola en estos tiempos de aislamiento social.
"Recibo mucho agradecimiento de los vecinos que pasan por el lugar donde estoy haciendo el mural porque interactúa e interpela a la comunidad en general y a todo el barrio. El dibujo que se plasma además contiene un significado y una identificación", explicó Crovetto convencida que la expresión artística debe estar presente siempre y a pesar de las circunstancias.
Ángeles ya va por su cuarto mural, pero antes de la pandemia se realizaban los murales participativos porque los alumnos se encargaban de pintar junto a ella.
"Con la llegada del virus ya no es posible que los chicos me ayuden, pero sí seguimos en contacto con las autoridades de cada establecimiento para trabajar en el eje temático, con la comunidad educativa porque el dibujo final tiene que ver con los proyectos institucionales del colegio", manifestó la artista que vive en Canning, Partido de Ezeiza.
Interpelar a todas las personas que vean su arte, es a lo que apunta la muralista. "Todas las personas, de distintas edades se paran para mirar los colores, para hacer preguntas y hasta para contarme su historia personal con la escuela pública y eso es muy gratificante", aclaró.
Gracias a un permiso especial y a la autorización del Municipio de Ezeiza, Ángeles está trabajando en el mural de la Escuela EGB N°2 Canale, ubicada en Tristán Suárez que a días de finalizarlo muestra un homenaje al creador de la Bandera Nacional, Manuel Belgrano.
"Ojalá pronto se pueda dar la vuelta a las actividades de todos los trabajadores de la cultura", añoró la profesional que continuará su trabajo en la Escuela N°23 del Barrio La Unión de Ezeiza y a la espera que los alumnos vuelvan al colegio y puedan sorprenderse gratamente al ver una fachada distinta, llena de color y con una identificación cultural.