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“Aeroplanos” llega a Banfield para generar risas y emoción

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Esta creación muy profunda e intimista de Carlos Gorostiza, interpretada por los actorazos Rodolfo Ranni y Guillermo Marcos, cuenta la historia de dos amigos que se conocen desde hace 60 años.

“Aeroplanos”, de Carlos Gorostiza, un clásico del teatro argentino, cuenta la historia de dos amigos entrañables de clase media que se conocen desde hace 60 años y su convivencia mete al espectador en un intenso y rico intercambio de humor, ternura y solidaridad.

Interpretada por Rodolfo Ranni, que también se hace cargo de la dirección, y por Guillermo Marcos, dos actores de largo rodaje en las tablas, se presenta este viernes en el Teatro Maipú de Banfield. Estos dos amigos sienten la amistad como un verdadero gozo que el espectador comparte desde su propia experiencia.

“Ven la amistad desde un perspectiva profundamente humana y eso se logra conociendo la humanidad, transitándola. Esa humanidad y solidaridad están en el corazón de la gente, pero tienen que ocurrir algunos acontecimientos para que eso salga a flote de manera muy contundente”, comenta Guillermo Marcos, uno de los integrantes del elenco, sobre lo que ocurre en escena.

Para este gran actor, esa amistad entre los protagonistas “sale a flor de piel, es una amistad no dicha, no expresada, que está latente y que luego brota como un manantial”.

La obra plantea, desde el alma misma del adulto mayor, el oscuro temor a la muerte, la soledad, la pérdida de la independencia y la iluminada esperanza de disfrutar libremente los últimos años de vida.

“Se produce un estallido en la gente, una catarsis, una identificación que permite purgar emociones. Esto se cuenta en un lenguaje muy sencillo, pleno de porteñismo y argentinidad profundamente entendible que baja a los elementos más impenssdos del espectador”, explica.

GOROSTIZA Y EL TANO. “Carlos Gorostiza es un extraordinario autor, uno de los grandes en crear unas verdaderas arquitecturas teatrales. Sus obras son verdaderas joyas en las que nada está porque sí, todo se justifica, incluso el humor”, explica Guillermo.

Este actor tuvo l a oportunidad de conocer a este gran autor argentino. “Tuve el placer de conocerlo y compartir con él la experiencia de Teatro Abierto, el primer boquete que se le hizo a la dictadura”, recuerda sobre esa experiencia que nucleó a empresarios, autores, directores, actores y al público en plena dictadura en contra de la censura imperante.

Este actor, además, dentro de Teatro Abierto tuvo el privilegio histórico de ser parte de la última obra de teatro que salió a escena con “Estado de Sitio”, el 29 de octubre de 1983, un día antes de la elecciones. En esta pieza comparte el elenco con Rodolfo Ranni, un grande de la actuación. “Es fascinante trabajar con el Tano, es un actor descomunal. Me gusta su concepción del teatro y es un amigo de la vida, además la dirige y, como es actor, les sabe ver los piolines a los otros actores”, cie

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