A 20 años de Cromañón: la lucha de una sobreviviente lomense

HERIDAS QUE DUELEN. Fabiana Puebla logró salir con vida de aquel trágico hecho y continúa alzando la voz en honor a los 194 fallecidos en el boliche de Once.

Fabiana lucha a diario por la memoria de los 194 fallecidos en Cromañón

Fabiana lucha a diario por la memoria de los 194 fallecidos en Cromañón.

Una herida que aún duele. Se cumplen 20 años de la tragedia de Cromañón, un hecho que marcó un antecedente en la historia argentina. En aquella noche del 30 de diciembre de 2004, en la que cientos de fanáticos fueron a un boliche de Once a ver un show de Callejeros, una bengala ocasionó un incendio que se cobró 194 vidas. La lomense Fabiana Puebla (47) es una de las sobrevivientes y, en una charla con el Diario La Unión, contó cómo es convivir con el dolor, ya que allí perdió a quien era su pareja, José Cantale, y qué es lo que la mantiene de pie a dos décadas de un suceso que jamás olvidará.

Hace exactamente dos décadas, Fabiana había ido al boliche "República de Cromañón" a disfrutar de un recital, sin saber que horas después iba a ser testigo de un verdadero inferno del que, afortunadamente, logró salir con vida. Hoy en día, Puebla alza la voz por los 194 fallecidos de una tragedia que está más presente que nunca.

"Al mirar para el pasado, veo con orgullo todo lo que se pudo hacer en estos 20 años. Rescato la lucha y no haberme quedado de brazos cruzados, aunque entiendo el accionar de cada uno en su vida porque esto nos atravesó de manera cruel, difícil y dolorosa", empezó a contar Puebla, quien es parte de "Movimiento Cromañón".

Al mirar para el pasado, veo con orgullo todo lo que se pudo hacer en estos 20 años. Rescato la lucha y no haberme quedado de brazos cruzados, aunque entiendo el accionar de cada uno en su vida porque esto nos atravesó de manera cruel, difícil y dolorosa.

La memoria de Fabiana le trae al presente algunos recuerdos de ese instante en el que todo cambió, un momento que fue un antes y un después para cientos de familias. "Cuando vi que el fuego se adueñó del boliche y que ya había personas desvanecidas a mi alrededor pensé en lo peor, en que no iba a poder salir de ahí y que me iba a morir. Hice un último esfuerzo por querer salir y lo logré porque pensé en mis seres queridos y en José, mi compañero de vida, sabiendo que él estaba buscándome por ahí en algún lado", dijo, con la voz sensiblemente resquebrajada.

Lamentablemente, José perdió la vida y Fabiana se enteró del triste suceso a las horas, cuando aún se encontraba hospitalizada. Pero ella, durante la madrugada, ya había tenido un extraño presentimiento de que su novio no se encontraba con vida.

La lomense fue contundente al expresar que la tragedia de Cromañón fue un hecho que se pudo haber evitado: "El boliche no tenía que tener el agua cortada ni las puertas con candados. Tampoco debía tener las mangueras para los bomberos pinchadas o los matafuegos inutilizables. Fue una negligencia con varios actores involucrados y por eso sostengo que fue una masacre".

El boliche no tenía que tener el agua cortada ni las puertas con candados. Tampoco debía tener las mangueras para los bomberos pinchadas o los matafuegos inutilizables. Fue una negligencia con varios actores involucrados y por eso sostengo que fue una masacre.

Este aniversario encuentra a Fabiana en plena lucha con el objetivo de que se establezcan leyes que favorezcan a los sobrevivientes y a los fallecidos en Cromañón, para que su memoria siempre esté presente. "Queremos tener, de una vez por todas, el Espacio de Memoria Colectiva y no vamos a descansar hasta conseguirlo. Veinte años es mucho tiempo, pero pelearemos para que cada sobreviviente de la masacre sea reconocido por el Estado y la sociedad".

Queremos tener, de una vez por todas, el Espacio de Memoria Colectiva y no vamos a descansar hasta conseguirlo. Veinte años es mucho tiempo, pero pelearemos para que cada sobreviviente de la masacre sea reconocido por el Estado y la sociedad.

Es importante mencionar que Fabiana también debió luchar con una grave enfermedad, ya que en 2018 le detectaron leucemia y, posteriormente, un cáncer de tiroides. Pero la lomense es una luchadora y pudo sobreponerse ante otro golpe que le dio la vida: "Casi seis años después me encuentro siendo madre y con una salud un poco más delicada que requiere cuidados, pero siempre de pie militando por Cromañón".

"A José le diría tantas cosas, pero sobre todo que lo extraño un montón y que se llevó una parte de mí. Fue el amor de mi vida y quisiera poder contarle todo lo que hice en este tiempo: si yo salí a la calle fue por él", cerró, entre lágrimas.