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La prueba que contradijo al asesino de Beatriz Pozzo para evitar la perpetua

FUE CONDENADO. No había dudas sobre el asesinato, pero la defensa trató de evitar la pena máxima. Una prueba a la que tuvo acceso La Unión fue clave para desacreditar al femicida.

El femicida y Beatriz Pozzo eran pareja al momento del hecho

El femicida y Beatriz Pozzo eran pareja al momento del hecho.

Durante el juicio por el femicidio de Beatriz Pozzo, la mujer asesinada a machetazos en Ingeniero Budge, el abogado del asesino apeló a una estrategia usada como recurso para evitar la prisión perpetua requerida por la fiscalía.

Desde el momento en que José Luis Torres se entregó a la Policía la madrugada del 29 de septiembre del 2023, no quedaban dudas de que había sido el autor del hecho que el mismo confesó en audios de WhatsApp, un llamado al 911, y estando incluso en la comisaría. Sin embargo, el objetivo de su defensa fue evitar la pena máxima.

Durante los alegatos, el letrado reconoció la autoría de su cliente en el asesinato, pero alegó que actuó bajo "emoción violenta", y pidió que sea condenado a 10 años de cárcel. No obstante, esto fue desestimado por el Tribunal Oral en lo Criminal en lo Criminal (TOC) 1 de Lomas de Zamora, que se basó en el planteo del fiscal Andrés Santos Procopio.

El representante del Ministerio Público Fiscal sostuvo que Torres era consciente de sus actos y comprendía perfectamente lo que había pasado, en base a las pruebas incorporadas a la causa, y que fueron incluidas en el juicio. Para ello, fueron claves los audios que el femicida envió esa misma noche a sus familiares y amigos, minutos después del crimen de su pareja.

Además, los testimonios de los familiares de Pozzo, que aseguraron que el hombre la había "aislado de todos", fueron suficientes para comprobar que la mujer vivía en un contexto de violencia de género.

Cabe recordar que en una de las audiencias, el acusado había reconocido el ataque, pero aseguró que fue en respuesta a una agresión por parte de Nélida. Afirmó estar arrepentido y recordó que él mismo se había entregado.

Finalmente, Torres, quien era juzgado desde el 20 de noviembre último, fue condenado a perpetua el martes pasado por el delito de "homicidio agravado por el vínculo, por haber sido perpetrado por un hombre hacia una mujer mediando violencia de género", tal como había solicitado el fiscal Santos Procopio.

El fallo dejó conforme a la familia de Pozzo, quien reclamaba justicia por el brutal asesinato. "Ahora esperemos que no haya ninguna rebaja por comportamiento o demás cosas que pasan en nuestra Justicia", señaló Osvaldo Garofalo, cuñado de la mujer, en diálogo con La Unión.

LOS AUDIOS CLAVE EN LA CAUSA

En total, José Luis Torres envió tres aberrantes audios de Whatsapp, luego del sangriento asesinato de Beatriz Pozzo. Los mensajes fueron extraídos gracias a las pericias de su teléfono celular. En ellos les confesó la autoría del hecho a sus familiares, tal como hizo más tarde con la Policía, al momento en que se entregó en la Comisaría 10° de Lomas de Zamora.

"Yani, ¿cómo estás? Escuchame, me peleé con Neli y acabo de hacerla mierda, sabés? así que voy a ir preso seguro, así que te aviso eso. Avísale a Luis y a María. Yo la tengo tirada ahí en el fondo. Ya está. Eso te quería avisar", transcribieron los investigadores en el documento al que tuvo acceso este medio de manera exclusiva.

"¿Qué haces Luis, como andás? Recién maté a Neli, así que voy a ir en cana seguro, ni hablar, de cajón. Está tirada ahí al fondo sabés? Dale, eso te quería avisar. Avisale a María. Ya llamé a la policía ahora", le contó a otra persona de su entorno.

Por último, se comunicó con otra mujer: "¿Qué hacés Vero? Escuchame no me esperes mañana, sabes? La maté a Neli, te aviso viste? ya enseguida va a venir la policía y ya me llevan preso. Bueno Vero, gracias por todo eh. Terminó como todo esperaba. Dale, nos vemos".

De acuerdo al análisis del teléfono, los peritos determinaron que los audios fueron remitidos el día 29 de septiembre entre las 00:11 y 00:13 horas, en el lapso comprendido entre el llamado al sistema de emergencias 911, en el que Torres requirió la presencia de un móvil policial por haber matado a su mujer.

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