Un hincha de Lanús fue detenido por gestos racistas en el Mineirao
COPA SUDAMERICANA. El Granate consiguió un empate muy valioso ante Cruzeiro, pero no todas fueron buenas: de qué acusan al simpatizante argentino.
Lanús rescató un punto de valor, al empatar 1-1 ante Cruzeiro, en el partido ida de la Copa Sudamericana, en el Estadio el Mineirão. Al margen de lo futbolístico, la alegría no pudo ser completa para algunos simpatizantes del Granate debido a que un hincha fue detenido por hacer gestos racistas hacia sus pares de equipo brasileño, en la ciudad de Belo Horizonte.
Según informó el medio brasileño O Tempo Sport, el arrestado por la Policía Militar (PM) fue un joven de 18 años que imitó a un "mono", y tenía cubierta la cara con una camiseta.
La detención fue realizada por los efectivos del Policías del Batallón de Choque quienes localizaron al hincha en el gimnasio Mineirinho, donde se reunían los hinchas de Lanús antes y después del partido, tras las imágenes que quedaron grabadas en las cámaras de seguridad del estadio.
El argentino fue trasladado a la comisaría de Mineirão, y luego a otra dependencia, en el barrio Alípio de Melo, región noroeste de la capital, donde quedó registrado el hecho, que tendrá bajo la investigación de la Policía Civil de Minas Gerais (PCMG).
MÁS HECHOS DE RACISMO
Este no fue el único hecho de racismo registrado en el estadio del Raposa, hubo otros dos, pero no fueron detenidos.
Uno de ellos ocurrió después de la apertura del marcador con el gol del delantero del Cruzeiro, Kaio Jorge, cuando otro hincha del Granate hizo gestos de "mono" hacia sus pares brasileños. Si bien fue identificado por el personal de seguridad, permaneció en la tribuna.
El tercer episodio tuvo lugar en la previa del encuentro, cuando se daba el ingreso de los hinchas de Lanús, por la pasarela entre Mineirinho y Gigante da Pampulha, donde gritaron la palabra "mono" a los locales que llegaban al estadio.
Tras estas provocaciones, los hinchas de Cruzeiro respondieron con botellazos de cerveza hacia el lugar donde se ubicaban los argentinos. Para contener los disturbios, la Policía Militar intentó contener el conflicto y lanzó bombas paralizantes.