Un tiroteo en el '91, la solidaridad y la reapertura: la historia de Café Dalí
identidad. El restobar fue inaugurado en 1980 con el nombre del famoso artista español Salvador Dalí y desde sus inicios, se convirtió en un lugar popular para los lomenses.
En cada ciudad hay comercios históricos, esos que lograron imponer su marca entre los vecinos gracias a su permanencia a lo largo de décadas y su conexión con la cultura local. En Lomas de Zamora, claro, tenemos varios casos, algunos de los cuales ya hemos tratado aquí, en las páginas del querido Diario La Unión.
Uno, por ejemplo, es la pizzería Las Carabelas, que a fines de 2022 reabrió sus puertas después de tres años y hoy parece gozar de muy buena salud en la misma esquina de siempre, en Boedo y Acevedo. Qué rica que es la muzza al molde...
Hoy los invito a caminar tres cuadras (hasta Sáenz y Pellegrini) para conocer una historia parecida: la de un comercio muy querido que lleva décadas funcionando en el centro de Lomas, y que hace poco más de dos años también estuvo a punto de cerrar sus puertas. Les hablo de Café Dalí.
El restobar fue inaugurado en 1980 con el nombre del famoso artista español Salvador Dalí y desde sus inicios, se convirtió en un lugar popular para los lomenses. Lamentablemente, muchos lo asocian a un triste caso policial que sacudió a nuestra ciudad: el del crimen de Sergio Schiavini, en 1991.
El 29 de mayo de 1991, ese joven poeta quedó en medio de un tiroteo entre policías y ladrones dentro de la confitería. Sergio fue usado como escudo humano por los delincuentes y terminó cayendo en la balacera. Todos los ladrones que participaron del episodio fueron a la cárcel.
Una buena: ubicado en Carlos Pellegrini 201, Dalí recibió durante el momento de más restricciones por la pandemia al personal de salud y seguridad, ofreciéndoles café de forma gratuita en forma de agradecimiento por el trabajo realizado para luchar contra el virus. También invitaron almuerzos a quienes donaban plasma y hasta cambiaron cafés o cervezas por juguetes en buen estado para ser entregados a chicos carenciados en Navidad y Reyes.
A principios de 2022, los vecinos de Lomas se enteraron la triste noticia de que Dalí, después de 42 años, iba a cerrar "definitivamente" por problemas económicos, en medio de un éxodo de comercios hacia el lado de Las Lomitas. La administración del espacio gastronómico, que había llegado durante la pandemia, explicó la dificultad de mantenerlo con el servicio que ofrecía, de desayunos, almuerzos, meriendas y cenas.
Sin embargo, pocos días después de anunciar el cierre ocurrió lo inesperado: tras conseguir el aval de los vecinos, las autoridades municipales habilitaron la posibilidad de organizar espectáculos, así que café Dalí siguió funcionando en la esquina de siempre, con música en vivo y noches de karaoke.
¡Hasta la semana que viene, amigos!