Las provocadoras fotos del acusado por el crimen de Fernando González
INDIGNACIÓN. Fotos de fiestas, drogas y alcohol, con la tobillera electrónica de uno de los imputados. Insisten en que viola el arresto domiciliario y que hasta fue a un velorio.
La familia de Fernando González, el joven asesinado a la salida de una fiesta de cumpleaños en Villa Fiorito, insiste en que uno de los imputados viola el arresto domiciliario con tobillera electrónica que debería cumplir en su casa.
Semanas atrás, desde el entorno familiar de la víctima aseguraron que Ricardo Blanco "se paseaba por el barrio" a bordo de su moto, apenas fue beneficiado con la morigeración de prisión. Sin embargo, eso no fue todo, según señalaron a La Unión.
"Lo vieron en el velatorio de Enzo Gabriel Capis, el chico que mataron en Villa Diamante su suegro y su cuñado", indicaron a este medio los familiares del fallecido. Se trata del joven mecánico baleado en Fiorito, cuyo terminó chocado en el partido de Lanús. Aparentemente, era amigo de uno de los sujetos procesados por el homicidio de Fernando González.
Además de ello, suele organizar fiestas "casi todos los fines de semana" en su casa, donde se toma fotos junto a sus amigos, que publican las imágenes, a modo de provocación en redes sociales, con drogas, bebidas alcohólicas y la tobillera electrónica.
Blanco es considerado cómplice de Bruno Godoy, a quien se le atribuye ser el autor del disparo que terminó con la vida de González, y que permanece tras las rejas con prisión preventiva.
El Juzgado de Garantías 3 de Lomas de Zamora había dispuesto que continuaran tras las rejas. Sin embargo, la defensoría interviniente otorgó el beneficio para uno de los dos sujetos procesados por el hecho ocurrido la madrugada del 8 de octubre pasado.
El crimen de Fernando González
González fue herido de muerte en Quesada y Morazán, durante la madrugada del 8 de octubre pasado, cuando quiso rescatar a su amigo, llamado Cristian, quien fue alcanzado por varios impactos de bala, pero sobrevivió al ataque.
Todo empezó en una fiesta de cumpleaños, donde la víctima fatal había ido con su hermano menor y unos amigos. En un momento apareció un conocido del barrio y empezó a agredir al hermano de González, aunque lo peor estaba por venir, y siguió afuera.
El joven recibió un tiro que le traspasó el brazo y le ingresó en el pulmón, lo que le provocó la muerte en pocos minutos, a pesar de que fue llevado de urgencia al Hospital Gandulfo de Lomas.
