Puerta Abierta, el centro cultural que une a una familia en el escenario

EN LLAVALLOL. El espacio cultural es administrado por los Maurizi: Diego es saxofonista; Cleria, bailarina; y los hijos de ambos, Franco, Victoria y Pedro, también están ligados al arte.

La pasión por el arte une a la familia arriba del escenario

La pasión por el arte une a la familia arriba del escenario.

En la familia Maurizi se respira arte, a tal punto que decidieron llevar su pasión a otros niveles con la firme intención de compartir la cultura con los vecinos. Con esa premisa fue que nació Puerta Abierta, un centro cultural que funciona en Llavallol desde 2019 y que es dirigido por Diego Maurizi (50), saxofonista lomense, Cleria Zangari (50), bailarina y su compañera de vida, y sus tres hijos Franco, Victoria y Pedro, también ligados al arte.

Diego vive en Llavallol desde que se casó con Cleria, hace más de tres décadas, y a partir de ese mismo momento es que comenzó a nacer el sueño de crear un espacio artístico en su propio hogar.

Danza y música fue lo primero que ofreció el espacio que hoy se conoce como Puerta Abierta, que está ubicado en Magallanes 440. Con el correr de los años, el lugar cultural fue creciendo y agregando actividades ligadas al arte, haciendo que la pareja se mude a unas cuadras. "Hace cuatro años fue que hicimos una expansión y logramos incluir al trabajo a nuestros hijos Franco, Victoria y Pedro", contó Maurizi. Todo en familia.

Franco (30) es dramaturgo, Victoria (27) es bailarina de danzas contemporáneas y Pedro (22) es actor, cantante y bailarín, quien actualmente es parte del espectáculo Fuerza Bruta, habiendo trabajado para Disney en distintas series. "A este proyecto también se sumó la actriz Sofía Jaimot, pareja de Franco, entonces somos una empresa familiar", sostuvo quien es músico egresado del Conservatorio Julián Aguirre de Banfield, institución en donde actualmente ocupa el cargo de director.

PASTOR ALEMÁN

Dentro del amplio abanico de propuestas que presenta Puerta Abierta, una de ellas es el espectáculo llamado Pastor Alemán, que tiene la particularidad de unir a todos los Maurizi en el escenario y de estar basada en hechos reales de la familia. "La obra cuenta la historia de mi suegro y surge a raíz de una pregunta que le surgió al propio Franco, que como dramaturgo lo plasmó en una pieza teatral", dijo Diego.

La obra, dirigida por Franco y Sofía, habla de dos nietos que ayudan con la mudanza a su abuela y que se encuentran con recuerdos que reafirman las preguntas acerca de quién era su abuelo, siempre ligado en el ámbito teatral y marcado por la pasión de la escena. En un momento de la historia, los nietos descubren que su abuelo también fue policía en la época de la dictadura militar, hechos que nunca fueron comentados ni estaban presentes.

"Los sucesos no se toman como aspectos negativos, sino que abre el interrogatorio de por qué su abuelo se hizo policía si antes era actor y bailarín", explicó Diego, e invitó a todos a ver la obra: los domingos 23 y 30 de abril estarán en el Abasto Social Club (Yatay 666) y las entradas se pueden adquirir por Alternativa Teatral.

"Cada función es una emoción sumamente profunda porque a mi suegro lo tengo en mi corazón y porque veo cómo mis hijos trasmiten sus sentimientos respecto a su oficio", recalcó Maurizi, con la voz resquebrajada.

Para finalizar, Diego invitó a todos los vecinos a conocer Puerta Abierta y su amplio abanico de propuestas culturales como música, danza, teatro, escritura, dibujo, acrobacia, de piso y teatro musical, además de conciertos: "Pudimos sobreponernos a la pandemia, en parte gracias a la ayuda del Municipio. Hoy nos encontramos de pie y la puerta siempre está abierta".