Guadalupe Casa de Niños cumple cuatro años de compromiso social
Festejo. El espacio de Turdera que pertenece a la ONG No Seas Pavote de Lomas alberga actualmente a 13 menores que llegan allí en el marco de una medida de abrigo.
Los primeros cuatro años de Guadalupe Casa de Niños y Niñas se festejarán este miércoles a las 17 en Turdera de forma íntima junto a los 13 chicos que viven allí y al equipo interdisciplinario que los acompaña a transitar el proceso hasta que son adoptados.
Este lugar es parte de los espacios que nuclea la ONG lomense, No Seas Pavote y nació con el propósito de brindar una casa a niñas y niños que estén en situación de vulneración de derechos.
"Inauguramos hace cuatro años y seguimos junto a un equipo terapéutico que acompaña a los chicos que están bajo un medida de abrigo, es decir de protección de derechos, que tiene como objeto brindar al niño o niña un ámbito alternativo al grupo de convivencia cuando en éste se encuentren amenazados o vulnerados sus derechos", detalló Gabriela Salisio, la coordinadora de la casa.
Una vez que se resuelve la situación particular de cada niño o niña quedan en situación de adoptabilidad, a la espera de una familia. Los niños que viven allí asisten a las escuelas del barrio: "Todo el equipo de trabajo está atento a cada situación que pueden pasar en el ámbito educacional porque no todos los establecimiento cuentan con las misma receptibilidad, luego asisten al Centro de Promoción Integral de la Infancia (CPII N°1) a contraturno escolar".
Inauguramos hace cuatro años y seguimos junto a un equipo terapéutico que acompaña a los chicos que están bajo un medida de abrigo, es decir de protección de derechos, que tiene como objeto brindar al niño o niña un ámbito alternativo al grupo de convivencia cuando en éste se encuentren amenazados o vulnerados sus derechos.
En total, trabajan en la casa de niños y niñas unas 20 personas. Aparte de la psicopedagoga, el espacio cuenta con una persona que acompaña todo el proceso pedagógico de los chicos en el día a día.
"Esto arranca cuando sentimos que había que poner el foco en las infancias después de contar dentro de la ONG con el Centro Barrial Tinku para hombres en situación de calle y la Casa Teresita para mujeres y mamás que sufren algún tipo de violencia", recordó la coordinadora respecto a lo sucedido hace cuatro años atrás.
Guadalupe es una de las casas más jóvenes y luego se inauguró un nuevo espacio para adolescentes, Nuestra Señora de Luján, en Centenario.
Una vez que se resuelve la situación particular de cada niño o niña quedan en situación de adoptabilidad, a la espera de una familia.
Algunos de los objetivos de Guadalupe es ofrecer herramientas al niño para fortalecer su autonomía, propiciar espacios que le permitan ejercer el derecho a ser oído, generar mecanismos que fortalezcan la permanencia en el sistema educativo, generar espacios de divertimento, recreación y esparcimiento, garantizar la salud física, psíquica y emocional y respetar todo lo referente a su identidad (desde la tramitación de Partidas de Nacimiento y DNI en caso que sea necesario) hasta el sostenimiento con sus familiares y/o progenitores en los casos que no haya impedimento judicial.
El espacio además recibe donaciones para quienes quieran colaborar con los chicos. "Lo que más se necesita diariamente son artículos de higiene personal y ropa interior nueva", pidió Salisio.
Para ayudar comunicarse a través de un mensaje de WhatsApp al 1130500509.