Ponen a disposición su comedor para terminar con la violencia de género
EXCELENTE INICIATIVA. Además de brindar la merienda, Los Pekes de Fiorito, en conjunto con el Municipio, darán charlas para mujeres que sufran maltratos físicos y verbales.
Porque "nuestra asistencia al barrio es mucho más que un plato de comida digno" es que el comedor Los Pekes de Fiorito decidió abrir sus puertas para contener a mujeres que atraviesan violencia de género: a partir del 16 de febrero y todos los miércoles, desde las 15, llevarán a cabo charlas y reuniones gratuitas con el objetivo de que las vecinas del barrio puedan compartir sus experiencias y sentirse acompañadas.
"Quise que la institución extienda la ayuda para el barrio. Sé que en Fiorito hay mucha violencia de género y por eso ofrecí mi comedor para las charlas", empezó a contar Roxana Cejas, referente de la institución, quien se acercó al Municipio para proponer un espacio de su merendero para las mujeres y LGBTI+ que cobran el Programa Acompañar y para todas aquellas que atraviesen alguna situación relacionada con el maltrato físico y/o verbal.
Quise que la institución extienda la ayuda para el barrio. Sé que en Fiorito hay mucha violencia de género y por eso ofrecí mi comedor para las charlas.
De esta manera, personal capacitado y puesto a disposición por el Municipio será el encargado de llevar a cabo estas charlas semanales en la sede de Los Pekes, situado en Esquel 2665, entre Milán y Filardi.
"En estos encuentros van a haber talleres relacionados con la violencia de género y charlas para que cada una pueda exponer, si así lo quiere, su situación. El objetivo es ayudarlas para que puedan salir adelante", agregó Rosy, que admitió haber sufrido por más de 12 años violencia de género, se sobrepuso y ahora quiere ayudar a que más mujeres lo hagan.
En estos encuentros van a haber talleres relacionados con la violencia de género y charlas para que cada una pueda exponer, si así lo quiere, su situación. El objetivo es ayudarlas para que puedan salir adelante.
"Muchas veces vienen vecinas a buscar la merienda o la cena y se quedan hasta lo último porque simplemente buscan contención, estar acompañadas y también distraerse de la realidad en la que viven", reveló Roxana, muy preocupada, pero dispuesta a aportar un granito de arena para cambiar la situación en Fiorito.
Las mujeres que sufran violencia en su hogar y quieran revertir la situación pueden ser parte de las charlas y acercarse al comedor o bien comunicarse con Roxana al 1160485602.