El sueño de Del Potro chocó contra un sólido Djokovic
US Open. El argentino rompió en llanto al perder la final del Abierto de los Estados Unidos ante el serbio en sets corridos. De todas formas, la derrota no empañó su gran trabajo a lo largo de todo el torneo, que lo jugó en un nivel altísimo.
No hubo milagro. Juan Martín del Potro chocó contra una pared llamada Novak Djokovic en la final del US Open. El argentino luchó y entregó todo, pero aún en la derrota nada empañó las dos semanas que lo mantuvieron entre los mejores del torneo.
El serbio se llevó la victoria con un marcador de 6-3, 7-6 (7-4) y 6-3, al cabo de tres horas y 16 minutos. Y además del título en el Abierto de los Estados Unidos, el tercero que logra (2011, 2015 y 2018), le arrebató al argentino el tercer lugar del escalafón mundial (este lunes aparecerá en ese puesto). Delpo se quedó con el de 2009, el por ahora único Grand Slam de su magnífica carrera deportiva.
El partido no defraudó a las expectativas previas. Los dos llegaron en altísimo nivel a la final, pero Novak se mostró más sólido. Dentro de un primer set parejo, el destino cambió a partir del octavo juego. Con su saque, Del Potro no pudo sostener un 40-0. Le quebraron y fue 6-3 en 41 minutos.
Djokovic quebró en el tercer game del segundo set, y estaba cómodo en el partido. Todo lo contrario era Del Potro, que sin embargo encontró corregir e igualar en tres.
El argentino estuvo a punto de quebrar en el octavo, que duró 20 minutos, pero no pudo y todo se encaminó al tie-break. En el desempate, el serbio no vaciló, mostró aplomo y cerró 7-4. El lamento en la cara del tandilense era elocuente. Dos sets abajo ante un rival que no daba ventajas.
El tercer set se quebró en el cuarto game. Djokovic se puso 3-1, Delpo recuperó el saque, lo empató, pero el balcánico tomó el servicio del rival y se puso 5-3 con su saque para liquidar la historia.
Nole se llevó el 14° título de Gran Slam, solo superado por el suizo Roger Federer (20) y el español Rafael Nadal (17). También estiró su paternidad sobre el argentino: 15-4.
Fue un torneo de ensueño para Del Potro. Nadie borrará su tremenda entereza, que solo Novak pudo derrumbar.
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