El Papa criticó los excesos policiales: "Puede ser un crimen de Estado"

Luego de la fuerte polémica que se desató en el país por el protocolo de uso de armas de fuego que permite a las fuerzas federales de seguridad disparar sin dar la voz de alto, el Papa Francisco fustigó las “ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias” y consideró que se trata de “homicidios deliberados cometidos por agentes estatales”.

El Sumo Pontífice lamentó este fenómeno “recurrente” al recibir en audiencia a una delegación de la Comisión Internacional contra la Pena de Muerte. En el encuentro, Jorge Bergoglio consideró que “todo uso de fuerza letal que no sea estrictamente necesario sólo puede ser reputado como una ejecución ilegal, un crimen de Estado".

“Se trata de homicidios deliberados cometidos por agentes estatales, que a menudo se los hace pasar como resultado de enfrentamientos con presuntos delincuentes o son presentados como consecuencias no deseadas del uso razonable, necesario y proporcional de la fuerza para proteger a los ciudadanos", dijo el Papa.

A principios de agosto, el papa Francisco inscribió por primera vez en el catecismo de la Iglesia Católica (libro de enseñanza oficial que contiene los principios de la fe) la oposición categórica a la pena de muerte y llamó a la Iglesia a comprometerse para abolir la pena capital "en todo el mundo".

Además, consideró que "los que tienen autoridad legítima deben rechazar toda agresión, incluso con el uso de las armas, siempre que ello sea necesario para la conservación de la propia vida o la de las personas a su cuida