Las fotos en el Lencho Sola que fueron virales y enamoraron a todos

A casi un año del último partido oficial con público en el fútbol argentino, el deseo de los hinchas de volver a las canchas se hace cada vez más fuerte. Y no es para menos. La llegada de la pandemia del Coronavirus coartó uno de los rituales preferidos de los argentinos: alentar al club de sus amores acompañado por sus seres queridos, y si es con un hijo, mucho mejor.

Esa nostalgia provocó que en las últimas horas se hiciera viral una secuencia de fotos que reflejan a la perfección lo que el fútbol y el club de barrio significan para una familia futbolera: amor en su máxima expresión con apenas un click. 

Y los protagonistas de esta historia son Nicolás, de 29 años, y Maite, de siete, quienes fueron capturados por el lente de la cámara de Bett Morón cuando miraban un partido de Banfield desde la platea del estadio Florencio Sola y derritieron a todos de amor, fundamentalmente a Samanta, mamá de Maite y mujer de Nicolás. "Cuando veo las fotos, me muero de amor. Es una foto que refleja el amor que se sienten", señaló ante Diario La Unión.

Nicolás es un hincha fanático del Taladro y le trasladó esa misma pasión a Maite, la hija mayor de la pareja (también tienen a Joaquín, de cuatro), y por eso ir al Lencho Sola se convirtió en un ritual entre padre e hija. Una salida ideal que, por la llegada de la pandemia, lleva 12 meses sin poder realizarse.

"La verdad que extrañamos un montón poder ir la cancha y esperamos volver pronto. Maite lo extraña un montón, le explicamos por qué no se puede ahora, pero lo disfruta desde la tele, al lado del padre y gritando los goles como si estuviera en la cancha", contó Samanta.

Y en esa línea, agregó: "Todos somos de Banfield y tratamos de ir a la mayoría de los partidos. Maite lo hace desde bebé y cada vez que va es una fiesta porque le encanta ir a la cancha a ver a Banfield".

Esta secuencia de seis fotos, publicadas en diciembre 2020 por la cuenta Sentimiento Inexplicable de Instagram y que refleja el amor entre un padre y una hija en un lugar sagrado para todos los hinchas del Taladro, tomó mayor relevancia en las últimas horas y rápidamente se hizo viral.   

"Ni sabíamos que existían. Unos conocidos nos avisaron de las fotos y cuando nos dijeron no parábamos de reírnos, no lo podíamos creer. Rápidamente me comuniqué con la página que las publicó para pedírselas y hoy me las dieron. Son hermosas. Demuestran como una hija absorbe la pasión del padre por un club de fútbol", concluyó.