Siempre soñó instalar un comedor y lo logró en pandemia

"La necesidad me golpeó la puerta", asegura Lorena Romero que, en plena pandemia decidió instalar una olla popular para los vecinos de Albertina, algo con lo que soñaba hace tiempo, pero no sabía como concretarlo. La situación de vulnerabilidad la ayudó a hacer realidad su sueño.

Así se creó el Comedor Vecinal Todo Corazón. Primero cocinaban en una esquina del barrio, pero luego la iniciativa se trasladó hasta la casa de Lorena.

"Somos un grupo de cinco vecinos que creamos este espacio social y gracias a las personas que nos ayudan logramos muchas cosas", expresó Lorena que también está acompañada por toda su familia en esta labor. Su marido Fabio Amaya se encarga de cocinar y de trasladar a su esposa a los lugares para buscar donaciones.

Los lunes van al Mercado Central para buscar verduras y frutas que luego entregan a cientos de personas del barrio.

"Asistimos a 42 familias y a 180 personas, los lunes con la bolsa de frutas y verduras y martes y jueves a las 20 entregamos la cena", contó.

Cuando Lorena se quedó sin trabajo en plena cuarentena y sus vecinos le pedían ayuda, no dudó ni un segundo en trabajar para asistir a quienes lo necesitan.

"Siempre colaboré con comedores de la zona, me dedicaba a dar una mano con lo que podía, pero esta es la primera vez que me pongo al frente de un espacio social", aseguró convencida que quiere seguir en ese camino.

Además de la comida, Lorena se encarga de buscar y entregar medicamentos que le donan. "Somos un grupo solidario que se dedica a colaborar ante una necesidad urgente. También hemos conseguido sillas de ruedas para vecinos que no contaban con los recursos", explicó.

En Ginebra 1680 funciona este espacio solidario que funciona siempre en conjunto. "Ya tengo a mis hijos grandes y ahora me puedo dedicar al 100% a esta labor. Estoy feliz de hacerlo porque le pongo toda mi energía. Además es lindo enseñarles a nuestros hijos con el ejemplo", aseguró.

UNA NECESIDAD URGENTE

Aunque Lorena recibe la ayuda de muchas personas solidarias, sigue en la búsqueda de una olla grande N°50, bien alta porque la que están utilizando para cocinar es prestada y sabe que en cualquier momento la va a tener que devolver.

"Es lo que más me preocupa porque cuando el dueño de la olla la necesite me la va a pedir y voy a tener que dejar a muchas personas sin su vianda", expresó con preocupación.

Si alguien puede ofrecer una olla de este tipo o para ayudar a Lorena con su labor, hay que comunicarse a través del numero de WhatsApp: 1556434816 o por mensaje privado en Facebook/Comedor Vecinal.