Los Parish Robertson y el sueño escocés en la Reserva Santa Catalina
viaje al pasado. En 1825 trajeron a doscientos veinte granjeros y artesanos presbiterianos escoceses para establecer una colonia agrícola en 16.000 hectáreas entre Lomas de Zamora y Esteban Echeverría.
El historiador Felipe Pigna y el escritor Pedro Saborido hicieron el espectáculo "Historias argentinas", una charla en donde se fusionan aspectos académicos y humorísticos. La presentación fue el sábado en el Teatro Coliseo, y antes de salir a escena ante una sala repleta, el historiador charló con Diario La Unión sobre los orígenes escoses de Lomas de Zamora.
El disparador de "cómo se gestó la deuda externa en el país", ante la consulta del periodista Aníbal Manzi, tuvo su referencia en los hermanos escoceses John y William Parish Robertson que fueron parte de la colonia escocesa que se instaló en Lomas de Zamora.
Es que estos hermanos fundaron una de las primeras firmas mercantiles que finalmente operó en todo el país; comprando productos agrícolas y vendiendo artículos manufacturados, sal, mate y tabaco.
En 1811 viajó al Paraguay (1811) desde donde logró transportar un cargamento de yerba mate (mil quinientos tercios) en botes de río españoles hacia Buenos Aires donde y se hizo de una pequeña fortuna. En 1813 fue testigo de la batalla de San Lorenzo, primera batalla americana en la que intervino San Martín (a quien Robertson ya había conocido en Buenos Aires).
En 1830, John Robertson regresó a Inglaterra; permaneció algunos años en Cambridge y después se retiró a la isla de Wright para trabajar con Williams en sus libros.
A John se unió su hermano William y practicaron el comercio con fines lucrativos en Asunción; luego se dedicaron al mercado del cuero, operando en sus propias estancias en Corrientes; en 1820, cruzaron los Andes para enriquecerse nuevamente con el comercio chileno y peruano; de vuelta a Buenos Aires, con bastante capital para invertir, los Robertson cooperaron con el presidente Bernardino Rivadavia en su deseo de atraer capitales europeos (especialmente británicos).
Le adelantaron dinero al Gobierno y ayudaron a garantizar el préstamo de la Baring Brothers; fueron accionistas del Banco de Descuentos y del Banco Nacional.
En 1825 trajeron a doscientos veinte granjeros y artesanos presbiterianos escoceses para establecer una colonia agrícola en 16.000 hectáreas de tierra entre Lomas de Zamora y Esteban Echeverría.
La colonia progresó notablemente durante los primeros tres años pero la anarquía y los disturbios en todo el país de 1829 dieron como resultado violentos ataques a la colonia por parte de los vecinos que querían la tierra para el ganado; esto desintegró la colonia y dispersó a sus miembros.
En 1830, John Robertson regresó a Inglaterra; permaneció algunos años en Cambridge y después se retiró a la isla de Wright para trabajar con Williams en sus libros sobre el Río de la Plata y otras regiones de Sudamérica; por varias razones, estas obras son fuentes muy valiosas para profundizar en la historia de este período; están recopiladas en dos grandes obras: Cartas sobre el Paraguay traducido al español en 1920 y Cartas de Sudamérica traducido al español en 1952.
Actualmente, en el espacio donde se había establecido la colonia escocesa, funciona el Centro de Interpretación y Museo MAgNA de Santa Catalina, un espacio de sitio universitario que funciona en el ámbito de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Lomas y que está situado dentro de la Reserva Natural Provincial.