Llavallol: detuvieron a una enfermera por falsificar recetas de fentanilo
GRAVE DENUNCIA. Emitía prescripciones médicas falsas, que eran utilizadas para retirar esa medicación de un hospital de Solano.
Una enfermera fue detenida en la localidad de Llavallol, acusada de falsificar recetas médicas para adquirir morfina y fentanilo, el potente opioide que está haciendo estragos en Estados Unidos.
Según informaron fuentes policiales a La Unión, se trataba de una mujer de 35 años que emitía prescripciones médicas falsas, con sellos y firmas apócrifas, donde recomendaba el suministro de dichas sustancias.
Los insumos de morfina y fentanilo estaban destinados a pacientes del Hospital Eduardo Oller de San Francisco Solano, donde trabajaba la enfermera. Mediante el uso de sus falsas recetas, personas ajenas al hospital retiraban la medicación recetada de la farmacia hospitalaria.
Tras una denuncia radicada por funcionarios del Municipio de Quilmes, empezó una investigación para probar el modus operandi de la enfermera. Con la evidencia obtenida, se ordenó allanar la farmacia del hospital, donde encontraron documentación que vinculaba a la profesional con estas prácticas ilegales.
Luego, se intentó allanar un domicilio registrado en Quilmes, pero la enfermera ya no vivía allí. Fue gracias al análisis de redes sociales y entrevistas en la zona que se pudo localizar una nueva dirección en Llavallol, donde lograron encontrar y detener a la mujer.
Efectivos de la Superintendencia de Investigaciones de Delitos Complejos y Crimen Organizado secuestraron cuadernos con información de interés, 54 recetas de fentanilo y morfina, historias clínicas, sellos, talonarios, ampollas de diferentes sustancias, una netbook y tres celulares que serán peritados.
La enfermera y el material secuestrado quedaron a disposición de la fiscal Ximena Santoro, de la Unidad Funcional de Instrucción Nº7 de Quilmes. El caso fue caratualado como "falsificación o adulteración material de documentos".
Cabe recordar que el fentanilo está produciendo una crisis de salud en Estados Unidos. La droga, originalmente utilizada como sedante para intervenciones quirúrgicas, es 50 veces más potente que la heroína. Su producción ilegal en el mercado negro y el consumo descontrolado tuvieron consecuencias devastadoras, ya que la sobredosis provoca un deterioro severo del sistema nervioso y cognitivo.