Se enamoró del oficio de enmarcar cuadros y ayuda a atesorar recuerdos

Transformar un oficio en arte. Eso realiza a diario Claudia Decker en su labor de marquera, una profesión que la acompaña hace ya cuatro décadas. Hoy en día posee su propio local en el centro de Lomas y disfruta de un oficio que aprendió desde su adolescencia, el cual sueña con trasmitirlo a próximas generaciones a través de un proyecto personal.

En una charla con el Diario La Unión, Claudia admitió que aprendió el oficio desde pequeña, ya que en su infancia solía ir a un local a enmarcar distintas fotos familiares. Ese mundo la enamoró por completo, al punto de poder empezar a trabajar en la profesión desde su adolescencia.

"El señor Francisco fue quien me enseñó el oficio de enmarcar, algo muy lindo y grato para mí ya que es una labor que nunca se repite. Jamás se sabe qué es lo que entrará por la puerta del local: pueden ser cuadros, fotos o espejos, todo se puede enmarcar", señaló, mostrando su pasión por el trabajo en cada palabra.

Jamás se sabe qué es lo que entrará por la puerta del local: pueden ser cuadros, fotos o espejos, todo se puede enmarcar

Cabe destacar que su profesión requiere de una gran cuota artística ya que Claudia recibe las materias primas y, a partir de allí, debe encargarse de transformar esos materiales en complementos perfectos para el objeto a enmarcar: "Yo realizo la pintura de las varillas de madera, corto los vidrios para los cuadros y uno todo en un solo elemento. Lo hago con compromiso porque es una decoración para el hogar, lo cual me genera un gran orgullo".

Yo realizo la pintura de las varillas de madera, corto los vidrios para los cuadros y uno todo en un solo elemento. Lo hago con compromiso porque es una decoración para el hogar, lo cual me genera un gran orgullo.

Según indicó la especialista, la labor se mantiene estable casi todos los meses, pero los cierres de cada año, los egresos escolares y universitarios y las vacaciones son momentos que hacen que el trabajo muestre un pequeño aumento. Esto se debe a que muchos vecinos deciden enmarcar sus fotos familiares, los recuerdos de distintos paseos o los diplomas por los estudios.

Al ser consultada sobre los pedidos más exóticos a la hora de enmarcar, Claudia contó dos situaciones que la marcaron como profesional: "Tuve que enmarcar unas zapatillas embarradas luego de un recital del 'Indio' Solari y un vestido de quince".

"Siempre trato de estar en movimiento, capacitándome con nuevos cursos para poder actualizarme y así aplicar lo aprendido en mi trabajo con el objetivo de satisfacer a mis clientes".

Claudia admitió que actualmente se encuentra llevando a cabo un profesorado, ya que tiene la intención en un futuro de poder dar clases y enseñar su oficio de marquera. "Mis hijas no continuaron con esta labor, pero me gustaría que todo lo que yo sé no quede en mí y se lo pueda trasmitir a más personas", concluyó.

Claudia admitió que actualmente se encuentra llevando a cabo un profesorado, ya que tiene la intención en un futuro de poder dar clases y enseñar su oficio de marquera.

El comercio de Claudia, llamado Monet Cuadros, se encuentra ubicado en la Galería Centerlom, la cual está situada Boedo 266 (local 13) y está a disposición de todos los vecinos. Además, cuenta con un perfil de Instagram donde muestra sus trabajos y artículos de decoración que están a la venta.