Los Andes celebra 84 años del estadio Eduardo Gallardón
ANIVERSARIO. Ubicado en la avenida Santa Fe, entre Sáenz y Portela, en Lomas Oeste, en este escenario se vivieron momentos imborrables. Un repaso por su historia.
Existen determinadas fechas que no pasan desapercibidas por la historia de un club de fútbol, y en el caso de Los Andes una de ellas es cada 28 de septiembre. En 1940, esta fecha marcó una bisagra que se tradujo en la inauguración de su propio estadio que lleva el nombre de Eduardo Gallardón, en reconocimiento a uno de los fundadores del tradicional club de Lomas.
Ubicado en la avenida Santa Fe, entre Sáenz y Portela, en Lomas Oeste, en este escenario se vivieron momentos imborrables. Entre ellos, las celebraciones multitudinarios por el último campeonato obtenido este año al ganar el Torneo Apertura de la Primera B -que le concedió un boleto para disputar la final del Clausura por el ascenso a Primera Nacional-, la asunción a Primera División, con más de 30.000 personas, y la fiesta del Centenario, que reunió una cantidad similar de hinchas.
Hace 84 años, el Milrayitas pudo hacer posible su lugar estratégico en Lomas, que se cristalizó gracias al apoyo de sus socios y un préstamo del Banco Avellaneda. Este grupo de inversores fue integrado por figuras ponderantes como Emilio Righi, quien presidía la institución por entonces y otros socios claves como lo fueron Francisco Márquez, José Cortina, Américo Palamara, los hermanos Agosti, Ángel Gennari, Horacio Palacios, Carlos Rivas, Ramón Larronde y Juan De Grazia.
El debut del estadio popularmente conocido como el "Gallardón" fue una jornada histórica: el 28 de septiembre de 1940, Los Andes enfrentó a su clásico rival, Temperley, y se impuso 2-1 con goles de De Andreis y Furnó, en un partido correspondiente a la fecha 18 del torneo de Segunda de Ascenso. Aquella tarde, el Milrayitas formó con Spinelli; Frers y Beghé; Méndez, Arista y Solari; Furnó, Vázquez, De Andreis, Velaz y Zatelli.
EL CAMINO AL ESTADIO PROPIO
El 27 de enero de 1939 se firmó el boleto de compra del terreno en Boedo 1500, y el 28 de junio de ese año se concretó la escritura, permitiendo que el sueño comenzara a tomar forma. Los Andes adquirió 36.000 metros cuadrados, donde antaño se cazaban liebres y perdices, por $35.000 de la época: $15.000 al contado y el resto a pagar en cinco años con cuotas semestrales de $2.000.
La inversión requirió un total de $129.500, suma con la que el club inició las obras de su estadio. El día de la inauguración contaba con una tribuna de cemento de 146 metros, con 15 escalones, que podía albergar a 5.000 personas. En ese primer partido, la recaudación fue de $1.196.
Con los años, el estadio fue evolucionando. En 1960, después del primer ascenso a Primera División, comenzó se construyó la actual tribuna lateral, Horacio Palacios. En la última década del siglo pasado, se renovó la platea principal y se instaló iluminación artificial. Tras el último ascenso a Primera, en el año 2000, se modernizaron los vestuarios, se implementó un nuevo sistema de drenaje en el campo de juego, se renovó la sala de prensa y se ampliaron las cabinas de transmisión. Finalmente, en 2007, se construyó la tribuna cabecera, hoy conocida como la Tribuna Centenario.
Actualmente, el estadio Eduardo Gallardón tiene una capacidad para 38.000 espectadores, y sigue siendo el símbolo del sueño cumplido y el crecimiento constante de Los Andes.