Denuncian que la familia acusada de mutilar animales en Turdera "se fugó"
. Las acusadas, conocidas como "las mutiladoras", se habrían ido luego del escrache realizado por proteccionistas que repudiaron su presencia en Monte Grande.
Las mujeres denunciadas por mutilar animales en Turdera, y que se habían mudado a Monte Grande, se habrían ido del barrio, luego de la manifestación realizada por proteccionistas para visibilizar las sádicas prácticas que se les atribuyen. Según ellos, se "fugaron del barrio".
"Se escaparon sin allanamiento previo, sin ninguna acción por parte del poder judicial", lamentó Leonela Barrios, una de las denunciantes que encabezó la marcha realizada el 3 de agosto pasado, que incluyó la agresión de una de las imputadas por los graves casos de maltrato animal.
En diálogo con La Unión, la mujer consideró que "es un chiste" la ausencia de medidas judiciales, a pesar de las pruebas presentadas en la investigación, que fue reactivada semanas atrás por las nuevas denuncias incluidas en una causa que había sido archivada.
"Para desarchivar la causa, presentamos cinco casos probados de diferentes animales en ese domicilio (de los acusados)", había señalado Leonela a este medio.
El caso de "las mutiladoras" de Turdera comenzó con un allanamiento en una casa de la calle Agüero al 300, donde encontraron varios animales rescatados en muy malas condiciones. Sin embargo, sorpresivamente, el Juzgado de Garantías 8 de Lomas de Zamora resolvió archivar la causa, aunque las denunciantes siguieron.
Luego, la joven, que sería la principal acusada, su madre y su tío, se mudaron a Monte Grande, a la calle General Paz al 100, donde continuaron con las torturas.
La situación derivó en nuevas denuncias y manifestaciones, esta vez ante el Municipio de Esteban Echeverría. Las autoridades tomaron rápidamente cartas en el asunto. A través de un comunicado oficial, desde la comuna que gobierna Fernando Gray decidieron que la madre de la joven dejara de trabajar en el Hospital Santamarina.