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Pozo de Banfield: alegatos con crudos detalles de las violaciones y torturas

LESA HUMANIDAD. Los fiscales continuaron detallando el horror de las víctimas y mencionaron dos casos escalofriantes. Mañana, la última jornada del año.

Este martes se llevó adelante la penúltima audiencia del año en el "Juicio Brigadas", proceso que juzga los delitos de Lesa Humanidad cometidos en el Pozo de Banfield, el Pozo de Quilmes, el Infierno de Lanús y la Brigada de San Justo. La fiscalía continuó con los alegatos.

Luego de dos jornadas de extensas exposiciones, los fiscales Gonzalo Miranda y Ana Oberlin presentaron la tercera parte de su alegato con crudos detalles sobre el horror que vivieron las víctimas en los centros clandestinos de detención durante la última dictadura militar. Detallaron terribles situaciones de abusos sexuales y torturas.

Uno de los casos más escalofriantes expuestos por los fiscales fue el de Nélida Lastreto, quien fue secuestrada en 1977 cuando tenía 21 años. "Fue violada en el Pozo de Banfield a pesar de que estaba embarazada. Fue torturada y en una oportunidad llevada a la rastra, porque tenía sus pies lastimados por la tortura, a una dependencia dentro de la Brigada y atendida por un supuesto médico, calvo de más de 50 años, quien le practicó un aborto", relató Oberlin.

La auxiliar fiscal recordó que durante el aborto a Nélida "le quitaron las vendas para que viera todo" y, una vez que terminaron, le dijeron a modo de burla: "¿Ves? Uno menos". Además, luego del procedimiento la siguieron torturando y se reían cuando ella se quejaba del dolor. "Gritá, que nadie te va a escuchar", le decían. Ese aborto, practicado en condiciones terribles, le impidió a Nélida tener hijos después de ser liberada.

Otro caso mencionado fue el de Adriana Calvo, docente universitaria. La secuestraron cuando estaba embarazada de su hija Teresa, quien nació en el asiento trasero de un Ford Falcon mientras la trasladaban al Pozo de Banfield. Una vez allí, el médico Jorge Bergés (imputado en este juicio) le quitó la placenta y la obligó a limpiar el piso mientras se burlaba de ella. Adriana pudo contar su horror durante el Juicio a las Juntas, en 1985.

El Tribunal Oral Federal Nº1 de La Plata dispuso un cuarto intermedio hasta este miércoles a las 8 de la mañana, en la que sería la última audiencia del año.