Día del Voluntariado: la importancia de dar sin recibir nada a cambio 

EJEMPLOS . Cristian Velasco y Quimey Mazoletti trabajan desinteresadamente en Familia TEA Abril y la filial de Lomas de la Cruz Roja. Ambos contaron cómo es la labor solidaria.

Todos los 4 de octubre se celebra en Argentina el Día del Voluntariado, una fecha que fue elegida para rendir homenaje a San Francisco de Asis, santo patrono del voluntario hospitalario. En Lomas, muchos vecinos se dedican a realizar labores voluntarias en instituciones que contribuyen a mejorar la calidad de vida de las personas: Cristian Velasco y Quimey Mazoletti son dos claros ejemplos y contaron de qué manera desempeñan su trabajo solidario, además de compartir las sensaciones que les genera ayudar sin recibir nada a cambio.

Cristian Velasco es técnico superior en Acompañamiento Terapéutico y hace seis años es integrante de Familia TEA Abril, una organización que se dedica a ayudar y a acompañar a familiares de vecinos que tienen trastorno del espectro autista. Su labor en la asociación, la cual realiza en conjunto con su compañera de equipo Pabla Díaz, lo hace "de corazón para darle una mano a los que lo necesitan".

Cristian destacó que el objetivo de Familia TEA Abril es tender puentes y unir a padres y madres de chicos con autismo a que puedan interactuar entre sí, acompañarse, ayudarse y pasarse tips para afrontar los diagnósticos de sus hijos. Además, dictan charlas gratuitas sin costo para "poder trasmitir los conocimientos adquiridos desde la experiencia".

Cristian destacó que el objetivo de Familia TEA Abril es tender puentes y unir a padres y madres de chicos con autismo a que puedan interactuar entre sí, acompañarse, ayudarse y pasarse tips para afrontar los diagnósticos de sus hijos.

"Los pasos que logramos dar y el reconocimiento que la gente tiene con vos, ya sea con una sonrisa o un agradecimiento, es súper importante. Es lindo dar un mano gratuitamente a una persona que no tiene los recursos", explicó.

Por su parte, Quimey Mazoletti es voluntaria de la filial Cruz roja Lomas de Zamora hace más de un año. Allí ya es referente de Promoción de la salud y personas en situación de calle, un área en la que buscan contribuir a mejorar las condiciones de salud física, mental y social de las comunidades en situación de vulnerabilidad. "Realizamos tareas como testeos de VIH y campañas de donación de sangre, donde nuestro próximo proyecto es armar kits de higiene para personas en situación de calle", contó sobre su labor.

"El voluntariado es una parte muy importante en mi vida porque nuestras actividades, en las distintas áreas, contribuyen a mejorar la calidad de vida de las personas. El voluntariado es ayudar al otro de manera desinteresada, pero adquiriendo experiencia, conocimiento y la posibilidad de cruzarte con personas increíbles", reveló Quimey, muy emocionada.

"Hace 15 años que soy bombera voluntaria de Lomas. Dentro del cuartel, mi trabajo es meramente voluntario, lo hacemos porque queremos y la única recompensa que recibimos es el cariño del vecino luego de servirlos en alguna intervención", se sumó la lomense Sabrina Gerez.

Para cerrar, y en sintonía con sus colegas, explicó: "Ser voluntaria es tener empatía por el dolor ajeno, teniendo un sentido de pertenencia con la institución en la que uno ayuda. Los voluntarios somos personas muy comprometidas, sin importar el día y el horario, y no tengo duda de que somos seres especiales. No me imagino mi vida sin ser voluntaria ni bombera".