Se conocieron manejando colectivos y se jubilaron juntos en Lomas
compañeros y amigos. Claudio Bastiani y José Godoy dieron su última vuelta como choferes de la línea 562 de Yitos después de compartir juntos más de 30 años de amistad y trabajo.
Amigos y compañeros de trabajo apasionados por el manejo del transporte público.
Se conocieron hace más de 30 años en la empresa Expreso Cañuelas. Bastiani manejando la línea 186.
Godoy en la última vuelta.
Después de 30 años de compartir la misma pasión por el trabajo, Claudio Bastiani (57) y José Godoy (56) se jubilaron como choferes de colectivo el mismo día y recordaron sus años de trabajo juntos.
La última vuelta de estos amigos choferes la dieron en la línea 562 de Lomas de la Empresa familiar YITOS S.A. Se conocieron hace más de 30 años en la empresa Expreso Cañuelas donde hacían el recorrido de la línea 186, que iba de Llavallol a Constitución, y desde ese entonces el oficio no los separó y se fueron juntos a trabajar hasta el día de la jubilación.
"Fue muy emocionante cómo se dio esto de jubilarnos juntos porque ambos trabajamos un poquito más de la fecha que nos correspondía jubilarnos", contó Godoy que vive en Llavallol, y al igual que Bastiani eligieron manejar transporte público.
"Somos de la generación que tenía la oportunidad de elegir ser chofer. Recuerdo que desde muy chico quería ser conductor, llevar gente y se me dio. Personalmente me angustió mucho tener que dejar el colectivo", expresó muy emocionado Bastiani que vive en Esteban Echeverría.
Fue muy emocionante cómo se dio esto de jubilarnos juntos porque ambos trabajamos un poquito más de la fecha que nos correspondía jubilarnos.
Fue el 30 de junio que ambos se despidieron de sus compañeros y pasajeros: "Nos pusieron carteles en el colectivo para que todo el mundo sepa que era la última vuelta. Lo más loco que me pasó ese día es ver un grupo de personas que estaban en una parrilla y se pusieron a aplaudirme. También hubo muchos autos y colegas que me tocaban bocina durante el recorrida y luego recibir el cariño de los pasajeros que a muchos los conozco de llevarlos todos los días".
Si bien ambos sabían que llegaba el final, fue difícil porque los dos amigos coinciden en que "aman manejar", Bastiani aseguró que todas las mañanas se levantaba con ganas de ir a trabajar: "A mí la última vuelta me angustió, en realidad lloré desde que me salió la jubilación porque es muy fuerte dejar algo que hiciste durante tantos años".
Otra coincidencia de los choferes es que en YITOS manejaban la misma línea: la 562, pero distinta letra. Godoy hacía el recorrido de la C y Bastiani, el de la B. Además, en el recorrido salía primero Bastiani y detrás, el colectivo que manejaba Godoy, por lo que también hacían el mismo horario de la mañana.
Si bien sabían que llegaba el final, fue difícil porque los dos amigos coinciden en que "aman manejar", Bastiani aseguró que todas las mañanas se levantaba con ganas de ir a trabajar.
Pero lo más emocionante fue cuando ambos llegaron a la terminal alrededor de las 13 y se encontraron allí por última vez: "Nos recibieron con cohetes, espuma, estaban todos nuestros compañeros y hasta nuestra familia".
De cara al futuro, ambos van a disfrutar del descanso, pero luego van a volver a hacer algo que les guste y que lo puedan disfrutar, pero es tanto la pasión que tienen por el colectivo que los dos coincidieron en que tal vez manejen un micro escolar.
"Me parece que es algo más tranquilo y es la forma de seguir manejando", aseguró Bastiani. En tanto, Godoy dijo que ya le ofrecieron un micro escolar, pero que ahora piensa en descansar.
Sus encuentros están asegurados porque todos los viernes juegan a la pelota con sus compañeros de la empresa de colectivos y de ese deporte que los apasiona, no piensan jubilarse.
